En un discurso pronunciado el miércoles 25 de septiembre en la Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente congoleño Félix Tshisekedi planteó una cuestión crucial para África y su representación en el Consejo de Seguridad de la ONU. Al abogar por la creación de dos puestos permanentes para las naciones africanas en el Consejo de Seguridad, Tshisekedi destaca una cuestión importante de justicia y equidad geopolítica.
La propuesta de Félix Tshisekedi surge del deseo de reformar y revitalizar el multilateralismo, dando más peso a las voces africanas en los órganos internacionales de toma de decisiones. De hecho, el Consejo de Seguridad de la ONU, como principal organismo responsable de mantener la paz y la seguridad internacionales, debe beneficiarse de una representación verdaderamente equitativa y reflejar la realidad geopolítica global contemporánea.
El argumento de Tshisekedi a favor de dos puestos permanentes para África en el Consejo de Seguridad se basa en el reconocimiento del creciente papel del continente africano en los asuntos internacionales. Al otorgarle a África un lugar permanente y un derecho de veto dentro de este órgano crucial, no sólo se garantizaría una representación justa, sino que también se reforzaría la legitimidad con respecto a las decisiones tomadas.
Además, la candidatura de la República Democrática del Congo al Consejo de Derechos Humanos de la ONU subraya el compromiso de la República Democrática del Congo con la promoción de los derechos humanos y la democracia a escala internacional. Con el apoyo de la Unión Africana y la SADC, la República Democrática del Congo aspira a desempeñar un papel activo y constructivo en este organismo central para la protección de los derechos fundamentales y las libertades individuales.
La iniciativa de Félix Tshisekedi y la campaña para la elección de la República Democrática del Congo al Consejo de Derechos Humanos reafirman la importancia de la participación de las naciones africanas en los organismos internacionales y su deseo de contribuir significativamente a la construcción de un mundo más justo y equilibrado. Al dialogar con otros actores de la escena internacional y resaltar los valores de la paz, la democracia y el respeto de los derechos humanos, África afirma su voz y su lugar legítimo en la escena mundial.