En la provincia de Mai-Ndombe, los responsables del sector de la navegación se enfrentan a un gran desafío: prevenir los naufragios que afectan periódicamente a las embarcaciones que navegan por los lagos, el río Congo y los ríos de la región. Durante una reunión tripartita sobre las causas de los naufragios, las partes interesadas observaron con impotencia el incumplimiento de las normas de navegación, como la navegación nocturna y la sobrecarga, por parte de algunos armadores.
La observación es alarmante: las autoridades locales encargadas de supervisar el sector de la navegación no disponen de medios adecuados para controlar eficazmente los barcos y los armadores que violan las normas vigentes. A falta de dispositivos adecuados para localizar y castigar a los infractores, los servicios competentes se encuentran impotentes ante estos fallos recurrentes.
Para poner fin a estas tragedias marítimas, el gobernador Lebon Nkoso Kevani propone una solución pragmática: la creación de Estados Generales de Navegación. Esta iniciativa tiene como objetivo reunir a todos los actores involucrados en el sector, desde los servicios descentralizados locales hasta el gobierno central, con el fin de implementar medidas concretas y coordinadas para mejorar la seguridad de la navegación en la provincia.
Durante la reunión tripartita en Inongo, el gobernador destacó la urgencia de una acción concertada para fortalecer la supervisión de la navegación y garantizar la seguridad de las poblaciones que dependen de estas vías navegables para sus viajes y actividades económicas. Destacó la falta de embarcaciones y medios logísticos adecuados que padecen los servicios encargados de hacer cumplir las normas marítimas, subrayando la responsabilidad del ejecutivo nacional en este problema.
Los participantes en la reunión recomendaron unánimemente que el gobierno tome medidas concretas, como la adquisición de embarcaciones seguras, para mejorar la vigilancia y la seguridad de la navegación en la región. Es imperativo actuar con rapidez y eficacia para prevenir nuevos naufragios y proteger las vidas de los usuarios de las vías navegables. Esta conciencia colectiva debe ir acompañada de acciones concretas y de una coordinación reforzada entre los diferentes actores implicados en el sector de la navegación.
En conclusión, el problema de los naufragios en la provincia de Mai-Ndombe requiere una respuesta urgente y un compromiso firme de todas las partes interesadas. La seguridad marítima no puede verse comprometida y se deben tomar medidas inmediatas para evitar nuevas tragedias y garantizar la protección de las poblaciones que navegan en las aguas de la región.