**Fatshimetrie: Las tensiones políticas en Rivers ponen en peligro la estabilidad nacional**
La escena política en Rivers ha estado plagada de tensiones crecientes en los últimos tiempos, con el conflicto abierto entre el gobernador Siminialayi Fubara y el ministro del FCT, Nyesom Wike, que amenaza con desbordarse y afectar a todo el país. El INC (Congreso Nacional Ijaw) hace un llamamiento urgente al presidente Bola Tinubu para que intervenga y restablezca la calma en la región, a fin de evitar una escalada hacia el caos y la desintegración nacional.
En el centro de este enfrentamiento está una lucha de poder entre Wike y Fubara, alimentada por complejas cuestiones políticas y ambiciones personales. El INC señala que las acciones de Wike pueden estar motivadas por el deseo de aumentar las posibilidades electorales de Tinubu en las próximas elecciones generales, a expensas de la estabilidad de Rivers.
A pesar de los esfuerzos de Fubara por cumplir las directivas de Tinubu durante la reunión de resolución del conflicto en Abuja, el ministro del FCT no retiró el proceso judicial contra el gobernador, poniendo así en peligro los esfuerzos de reconciliación. Esta actitud fue vista como una traición a los acuerdos alcanzados en la reunión y generó una atmósfera de creciente desconfianza y polarización.
La reciente deserción de 25 miembros de la Cámara de la Asamblea de Rivers al Congreso de Todo el Pueblo de la oposición después de directivas presidenciales plantea dudas sobre las lealtades y motivaciones de algunos actores políticos en la región. Esta frágil situación requiere una intervención urgente y decisiva para evitar cualquier escalada del conflicto y sus consecuencias nocivas para la estabilidad regional y nacional.
Es imperativo que el Presidente Tinubu ejerza su autoridad y llame al orden al Ministro del FCT para restablecer un clima de paz y cooperación en Rivers. Toda la nación tiene sus ojos puestos en esta región estratégica, y el futuro político del país depende en gran medida de cómo se gestionen y resuelvan las tensiones actuales.
En conclusión, la situación política en Rivers es una prueba crucial para la democracia y la gobernanza en Nigeria. Los líderes del país deben actuar con sabiduría y responsabilidad para desactivar los conflictos y allanar el camino para un diálogo inclusivo y constructivo. La unidad y la solidaridad nacionales deben tener prioridad sobre los intereses partidistas y personales, para garantizar un futuro pacífico y próspero para todos los ciudadanos de Nigeria.