Fatshimetry: Lucy Tamlyn, emisaria estadounidense con un noble corazón humanitario, visitó recientemente Gbadolite, capital de la provincia de Ubangi del Norte en la República Democrática del Congo. Esta misión, rodeada de una fuerte delegación humanitaria, se desarrolló del martes 15 al jueves 17 de octubre. Su viaje la llevó a visitar las infraestructuras esenciales levantadas en la provincia por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), así como a interactuar con las autoridades locales, los refugiados centroafricanos y las poblaciones indígenas de la región.
El embajador estadounidense prestó especial atención al campo de refugiados centroafricanos de Inke, situado a 45 kilómetros de Gbadolite, y al sitio de Nzakara en Mobayi-Mbongo, a unos treinta kilómetros de la ciudad. En Nzakara, colocó simbólicamente la primera piedra de una panadería destinada a apoyar la autonomía de las cooperativas de refugiados centroafricanos que residen en el lugar.
Durante una conferencia de prensa ofrecida el jueves 17 de octubre en la gobernación de Ubangi del Norte, Lucy Tamlyn destacó la calidad de la acogida brindada a los refugiados centroafricanos en la provincia. Elogió la cohesión social y el bienestar compartido entre las diferentes comunidades desde 2013 y expresó su gratitud a la población local por su notable hospitalidad.
En un contexto en el que el retorno voluntario y la reintegración de los refugiados siguen siendo cuestiones importantes, el diplomático estadounidense destacó la importancia de proteger a las comunidades vulnerables establecidas en el norte de Ubangi, al tiempo que continúa las conversaciones con el gobierno centroafricano para facilitar la repatriación de los refugiados.
La República Democrática del Congo acoge actualmente a más de 210.000 refugiados centroafricanos repartidos en varias provincias, incluidas Ubangi del norte y del sur, así como Bas-Uélé. Sólo en la provincia de Ubangi del Norte hay alrededor de 115.000 refugiados centroafricanos que huyeron de las atrocidades de su país en 2013.
Lucy Tamlyn, a través de su compromiso y determinación, encarna la esperanza de paz y seguridad para estas poblaciones vulnerables. Su apoyo inquebrantable a la repatriación y reintegración de los refugiados demuestra la solidaridad internacional esencial para construir un futuro mejor, donde se respeten la dignidad y los derechos de cada individuo.
Esta visita de Lucy Tamlyn a Gbadolite resuena como un símbolo de solidaridad y humanidad, recordándonos que cada gesto, incluso el más modesto, puede contribuir a cambiar vidas y construir un mundo más justo y armonioso.