Fatshimetrie—Graduados de Akwa Ibom secuestrados en Zamfara: el llamado al apoyo del gobierno para la curación
La desgarradora historia de los graduados de Akwa Ibom secuestrados en Zamfara durante su viaje para comenzar su servicio nacional en el NYSC en Sokoto el año pasado ha revelado advertencias que son a la vez impactantes y alarmantes. Ocho miembros del Servicio Nacional de la Juventud fueron tomados como rehenes el 17 de agosto junto con el conductor de su autobús, en la carretera de Zamfara.
Su secuestro fue el comienzo de una experiencia traumática, que los privó de su libertad y los enfrentó a constantes amenazas a sus vidas. Después de ser rehén y ser liberado a plazos, el regreso a la libertad de Solomon Daniel, que fue el último en ser liberado, evoca una prueba que nadie debería soportar jamás.
Las víctimas compartieron sus emotivos relatos en Uyo, expresando considerables dificultades de salud y dolor postraumático persistente. Daniel, en particular, se mantuvo firme frente a los secuestradores, negándose a ceder a demandas de rescate que eran imposibles de cumplir, con el único motivo de que su madre viuda no podía pagarlos.
Sumido en el horror entre agosto de 2023 y agosto de 2024, Daniel sobrevivió en condiciones extremas, bebiendo agua turbia y masticando hojas para subsistir. Torturado a diario, atrapado en el miedo y el dolor, dijo: “Pensé que iba a morir”.
Victoria Bassey añadió el horror de menstruar sin poder lavarse y beber agua de una inundación para sobrevivir. Etim Bassey explicó la artimaña de los secuestradores haciéndose pasar por soldados.
En muestra de gratitud a quienes facilitaron su liberación, ex miembros del servicio nacional han hecho un emotivo llamamiento a los gobiernos federal y estatal para que los apoyen en su curación. Expresaron su gratitud a todos aquellos que contribuyeron a su rescate, incluido el presidente Bola Tinubu y el gobernador Umo Eno, al tiempo que pidieron empleo y asistencia para su recuperación.
El fundador de la Fundación Open Forum Care for Humanity, Matthew Koffi Okono, reforzó el llamado enfatizando la necesidad de asistencia gubernamental para facilitar su curación postraumática. Abogó por reformas al plan de estudios del servicio nacional, proponiendo un enfoque más orientado al desarrollo y la seguridad.
En conclusión, el llamamiento de los graduados secuestrados en Zamfara es un grito conmovedor que exige la atención y el apoyo del gobierno necesarios. Sus historias de supervivencia y resiliencia merecen ser escuchadas y prestadas atención, mientras Nigeria busca mejorar la seguridad de los jóvenes que participan en el servicio nacional y brindarles un camino hacia la curación y la reintegración.