Fatshimetrie, 22 de octubre de 2024. Un estudio exhaustivo realizado en los mercados de Kinshasa revela una tendencia al alza en los precios de las frutas de gran consumo, observándose importantes fluctuaciones en varios productos. Este aumento impacta directamente en el presupuesto de los hogares, que ahora tienen que pagar más para abastecerse de fruta.
Una de las observaciones más llamativas se refiere al precio de una caja de 50 kg de pomelo del Kongo Central, que ha aumentado de 60.000 a 65.000 francos congoleños. Este aumento del 7,6% se debe a factores estacionales y logísticos, como el deterioro de las carreteras de servicio agrícola y la depreciación del franco congoleño frente al dólar estadounidense. Esta situación pone de relieve los desafíos que enfrentan los productores y consumidores en un contexto económico volátil.
Al mismo tiempo, otras frutas importadas también están viendo aumentar sus precios, como las uvas, los kiwis, las peras e incluso la piña. Estos aumentos pueden atribuirse a variaciones en el mercado internacional y al aumento de los costos de transporte. Por tanto, los consumidores deben adaptarse a estas nuevas realidades y repensar sus hábitos de compra para hacer frente a facturas más elevadas.
Sin embargo, no todas las noticias son negativas, ya que algunas frutas están viendo precios más bajos debido a una mayor oferta en el mercado. Este es particularmente el caso de la carambola, las zanahorias, los aguacates e incluso las manzanas verdes y rojas. Esta reducción de precios ofrece un cierto soplo de aire fresco a los consumidores, que pueden así beneficiarse de productos más asequibles y variados para su dieta diaria.
Ante esta situación contrastante, es fundamental que las autoridades competentes y los actores del sector agrícola colaboren estrechamente para garantizar un suministro regular y equilibrado de fruta en los mercados. Las medidas para mejorar la infraestructura de transporte, apoyar a los productores locales y monitorear las fluctuaciones de precios globales podrían ayudar a mitigar los efectos de los cambios de precios en los consumidores.
En conclusión, la evolución de los precios de la fruta en los mercados de Kinshasa refleja los desafíos económicos y logísticos que enfrenta el sector agrícola. Esta situación exige una reflexión colectiva sobre formas de garantizar el acceso equitativo a alimentos saludables y asequibles para todos los ciudadanos.