El terror asola la región de Ahoada Este: nuevas víctimas de las sectas armadas

En el Reino de Edeoha, ubicado en las comunidades de Ahoada, estado de Rivers, Nigeria, acontecimientos trágicos han sacudido una vez más la región. Presuntos miembros de sectas, armados y violentos, sembraron el terror al matar ayer a dos personas más, sumándose a las cuatro víctimas que murieron el día anterior.

Esta historia de violencia en Ahoada East ha reavivado el trauma en la comunidad, que ya estaba desconsolada por el asesinato del anterior oficial de policía divisional de la ciudad, Bako Anghashim. Los acontecimientos recientes demuestran que la zona sigue siendo un foco de actividad criminal y relacionada con sectas.

Según los informes, jóvenes completamente armados reanudaron su reinado de terror ayer por la mañana temprano, matando a dos personas en Odiokwu, Ula-Ehuda, Reino de Igbu Akoh, Ahoada East LGA. Hector Ekakita, portavoz del Reino Igbu-Akoh, confirmó la tragedia y lamentó que estos actos de locura se produzcan apenas 20 horas después del asesinato de cinco personas en Edeoha.

Los residentes presenciaron la presencia sospechosa de personas vestidas de camuflaje y personal militar la noche anterior a los asesinatos. Al amanecer, el macabro hallazgo de los cuerpos sin vida de dos jóvenes acribillados a balazos sumió a la comunidad en el miedo y la angustia.

Hector Ekakita expresó su consternación por la escalada de violencia e hizo un llamamiento urgente al comisionado de policía del estado de Rivers, Mohammed Mustapha, para que refuerce urgentemente la seguridad en la zona. Destacó que estos ataques siembran terror y muerte entre los pobladores, generando un clima de miedo e inseguridad permanente.

Los residentes de la región están en estado de shock y algunos incluso se han visto obligados a huir para escapar de esta ola de violencia. Las autoridades locales enfrentan un gran desafío para restablecer el orden y la paz en la región, al tiempo que ponen bajo control a los grupos criminales que han reanudado sus actos de barbarie.

La situación es alarmante y requiere una respuesta inmediata y eficaz para proteger a la población civil. Los llamados a poner fin a la violencia y las actividades sectarias están aumentando, lo que pone de relieve la urgencia de abordar a fondo las cuestiones de seguridad y prevención del delito.

En conclusión, es imperativo adoptar medidas concretas para erradicar el flagelo del cultismo y la violencia armada en la región de Ahoada Oriental. Se deben garantizar la vida y la seguridad de los residentes, y la paz debe prevalecer sobre el terror y la muerte que azotan a la comunidad.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *