Fatshimetrie, 31 de octubre de 2024 – Los representantes provinciales de Kwango, región situada en el suroeste de la República Democrática del Congo, se reunieron este jueves en Kenge para discutir un problema importante: el avanzado estado de deterioro de la carretera nacional 1 (RN1) cerca el distrito del campamento de Kikwit. Esta situación crítica se produce tras las lluvias torrenciales caídas durante la noche del miércoles al jueves, que pusieron en peligro la movilidad de los habitantes de la región.
Según Emery Kunga, electo de la provincia, el estado deplorable de la RN1 constituye una grave amenaza para el tráfico y la conectividad de la región con Kinshasa. Subrayó la urgencia de intervenir para evitar un posible corte del tráfico rodado, que tendría consecuencias desastrosas para los residentes y la economía local.
Los diputados provinciales señalaron la responsabilidad de la empresa encargada de las obras de la RN1, denunciando la mala calidad de los trabajos que llevaron a la situación actual. Exigieron la instalación de un gran colector para gestionar el agua de lluvia y prevenir futuros desastres.
André Masala, presidente de la asamblea provincial de Kwango, expresó su preocupación por la ineficacia de las medidas adoptadas hasta el momento para remediar la situación. Pidió una intervención urgente del gobierno central para encontrar una solución duradera.
Una visita de campo reveló un charco de agua que amenaza directamente la RN1, lo que pone de relieve la falta de previsión de las autoridades locales y de las empresas responsables de las obras viales. El presidente Masala se reunió con funcionarios del Ministerio de Infraestructura, Obras Públicas y Reconstrucción para desarrollar un plan de emergencia para estabilizar la situación y prevenir nuevos desastres relacionados con el mal tiempo en el futuro.
El vicegobernador de Kwango, Rémy Saki, subrayó la importancia de la colaboración entre las autoridades provinciales y las organizaciones pertinentes para evitar que la situación empeore. Pidió apoyo financiero inmediato para implementar las medidas necesarias para preservar la RN1 y la seguridad de los residentes de la región.
En conclusión, la crisis vial que afecta a Kwango pone de relieve la urgencia de una acción coordinada y eficaz para proteger la infraestructura vital representada por la RN1. Las cuestiones económicas, sociales y de seguridad vinculadas a esta situación requieren una respuesta rápida y adaptada para garantizar la conectividad y el desarrollo de la región en los próximos años.