El reciente discurso del Ministro de Finanzas, Enoch Godongwana, durante la presentación del primer MTBPS del Gobierno de Unidad Nacional (GNU) provocó fuertes reacciones y análisis, en particular por parte del profesor Raymond Parsons de la NWU Business School. Este discurso pretende ser una estrategia pragmática, realista y creíble destinada a abordar los persistentes desafíos del bajo crecimiento económico y la alta deuda pública que aquejan a Sudáfrica.
El MTBPS para el año 2024 está totalmente de acuerdo con el compromiso general del Gobierno de Unidad Nacional de aumentar el crecimiento económico inclusivo y la creación de empleo. Las noticias sobre el logro de un superávit presupuestario primario y la estabilización de la relación deuda/PIB en el 75,5% son alentadoras, incluso si la reducción de la deuda se extenderá a lo largo de un período más largo.
Sin embargo, persisten riesgos en el panorama fiscal, particularmente en relación con la masa salarial del sector público, que representa el mayor riesgo inmediato para las finanzas públicas de Sudáfrica. Por lo tanto, el MTBPS para 2024 hace hincapié en la consolidación de amortiguadores y directrices fiscales de más largo plazo para garantizar la sostenibilidad fiscal. Sin embargo, está previsto un análisis más profundo de los datos y los compromisos fiscales cuando el prometido Plan de Desarrollo a Mediano Plazo esté disponible en enero y el presupuesto principal se presente en febrero.
Al identificar mejores perspectivas de crecimiento para un equilibrio fiscal futuro más sostenible, el MTBPS pudo capitalizar el impulso de las políticas implementadas por el gobierno de unidad nacional, así como los primeros signos de recuperación económica. Ahora se reconoce que la inversión y el desarrollo de infraestructura son esenciales para estimular un crecimiento más sostenido y crear empleos. Es por eso que el MTBPS enfatiza el crecimiento impulsado por la inversión, con una mayor participación del sector privado.
El Ministro de Finanzas tiene razón al señalar que el principal problema de Sudáfrica es esencialmente de crecimiento económico. El supuesto de un modesto crecimiento del PIB del 1,8% en promedio durante los próximos tres años pone de relieve la necesidad de un programa de acción para mejorar estas perspectivas de crecimiento. Lo que Sudáfrica necesita son unos cuantos años de crecimiento económico estable e irreversible para transformar la confianza empresarial de corto plazo en confianza de los inversionistas de largo plazo. Esto significa que el gobierno de unidad nacional debe permanecer fiel a sus compromisos económicos en los próximos meses..
Este reciente MTBPS trazó un nuevo camino económico que, una vez implementado adecuadamente, facilitaría durante los próximos tres años la búsqueda de un equilibrio entre las medidas que mejoren el crecimiento y la estabilización de la todavía elevada relación deuda-PIB. El desafío para el Gobierno de Unidad Nacional es, por tanto, crear un entorno macroeconómico basado indiscutiblemente en los pilares de la eficiencia, la estabilidad, la coherencia y la certeza, que también estaría en línea con el tema de la presidencia de Sudáfrica del G20 en 2025.