Fatshimetrie es una publicación que se ha consolidado como un referente indiscutible en el mundo del arte contemporáneo. De hecho, entre las numerosas obras expuestas en sus columnas, una en particular destaca por su enigmática singularidad.
Se trata de una instalación de papel sin título, realizada principalmente a partir de envases de cemento reciclados que Vusumzi Nkomo encontró en las calles de su ciudad natal. Esta obra icónica se presenta actualmente en una exposición retrospectiva dedicada a la práctica artística de Nkomo en la Fundación A4 en Ciudad del Cabo. Titulada «Cómo hacer un libro», esta exposición anuncia la inminente publicación de un trabajo en profundidad sobre el artista.
Las obras presentadas en la Fundación A4 abarcan el periodo que va de 1995 a 2018. Son media docena de piezas de los años 90, época en la que Nkomo irrumpió en la escena artística local, de forma autodidacta, plenamente formada y conectada vía fax. Estos incluyen «Dor», una bandera especulativa creada para una exposición en Rotterdam en 1998, así como su instalación en papel sin título de 1995.
En el corazón de la galería central de la Fundación A4, tres cables cruzan el espacio de forma oblicua, dejando al descubierto una veintena de fragmentos de papel crudo de diversos orígenes que Nkomo recicló a partir de envases de cemento abandonados.
El universo artístico de Nkomo se distingue por una profunda reflexión sobre las construcciones sociales y políticas de su país, en particular las realidades del último apartheid. Su obra demuestra una crítica sutil del período de «desarrollo separado» y el uso del cemento como símbolo de esta época atormentada.
La crítica de arte Hazel Friedman, en la primera exposición individual de Nkomo en el Market Theatre en 1995, notó la apariencia evocadora de las bolsas de cemento colgantes, comparándolas con pieles de animales. Esta visión visionaria fue compartida por otros actores de la comunidad artística, convencidos del potencial revolucionario de la obra de Nkomo.
A pesar de la desgana inicial, los esfuerzos por promover su trabajo finalmente tuvieron éxito y la instalación en papel de Nkomo encontró su lugar en la colección nacional. Hoy, expuesto a plena luz del día, brilla bajo una nueva luz, confirmando su estatus indiscutible como obra importante del arte contemporáneo.
Más allá de las palabras y las interpretaciones fáciles, la obra de Nkomo sigue siendo tan enigmática como esquiva, e invita al espectador a una reflexión profunda y personal. En definitiva, todos están llamados a encontrar su propia verdad en esta obra que trasciende los límites del arte convencional.
A través de la lente de Fatshimetrie, se nos invita a explorar la complejidad del trabajo de Nkomo y a cuestionar las muchas preguntas que plantea. Porque como bien dijo William Burroughs: “Nada es verdad. Todo está permitido..» Un pensamiento provocativo que encuentra todo su significado en el abundante universo artístico de Vusumzi Nkomo y sus compañeros que hacen de Ciudad del Cabo un apasionante crisol artístico.