La carretera Bel-Air en Kinshasa: un llamamiento urgente para la finalización de las obras

El barrio de Dallas, en Kinshasa, se enfrenta a una situación preocupante con el cese de las obras de construcción de la carretera Bel-air, que deja a sus habitantes en el limbo. Esta vía, crucial para conectar diferentes zonas, es fundamental para la vida diaria de los vecinos, estudiantes y alumnos de la zona. Se pide a las autoridades provinciales que reanuden la construcción de esta vía para aliviar la congestión del tráfico y garantizar la movilidad para todos. La población local, bloqueada por esta situación, expresa su consternación y exige una acción rápida para completar las obras, garantizando así un acceso vial seguro en la región.
Fatshimetrie, 8 de noviembre de 2024 – Una situación preocupante pesa sobre los habitantes del distrito de Dallas, en Kinshasa, en la República Democrática del Congo, mientras las obras de construcción de la carretera Bel-air están paralizadas, dejando a los usuarios en un callejón sin salida. Esta arteria, aunque crucial para conectar Kimwenza, Kindele y la Universidad de Kinshasa, sigue sin terminar, lo que provoca preocupación e indignación entre los residentes locales.

El jefe vecinal de Dallas, Mukadi Mbuyi, destaca la importancia vital de esta carretera para la comunidad local. De hecho, la conexión con la carretera Bay-pass y la Misión Kimwenza es esencial para la vida diaria de los residentes, estudiantes y alumnos. El llamamiento urgente lanzado a las autoridades provinciales tiene como objetivo reiniciar las obras de esta vía, fundamental para aliviar la congestión del tráfico y garantizar la movilidad para todos.

Las obras de rehabilitación comenzaron en 2022 tras manifestaciones populares que reclamaban desde hacía tiempo esta modernización. Desafortunadamente, la construcción fue interrumpida, dejando a la población local en un aprieto. Los residentes de los barrios vecinos, como Kimwenza, Kimbondo y Ngasele, que contaban con la finalización de esta carretera, se enfrentan ahora a importantes dificultades de tráfico, lo que dificulta su vida cotidiana y sus desplazamientos.

Ruffin Mokoha da testimonio de los obstáculos actuales en la carretera de Bel-air, donde incluso el viaje a Kimwenza o a la Universidad de Kinshasa se ha convertido en una auténtica carrera de obstáculos. La situación pone de relieve la urgencia de que las autoridades tomen medidas rápidas para completar las obras, teniendo en cuenta las necesidades y expectativas legítimas de los ciudadanos.

En definitiva, el llamamiento lanzado por la población del barrio de Dallas es un grito de angustia, una demanda legítima de acceso vial seguro y eficiente en una región en auge. Ahora es fundamental que las autoridades provinciales tomen las medidas necesarias para responder a este llamado y completar la construcción de la carretera Bel-air, con el fin de garantizar la movilidad y el bienestar de las comunidades locales.

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