La cuenta atrás climática: el llamado urgente del Secretario General de la ONU a actuar ahora

En un conmovedor discurso en la Cumbre Mundial sobre Acción Climática celebrada en Bakú, el Secretario General de la ONU, António Guterres, advirtió sobre la urgente necesidad de limitar el aumento de la temperatura global a 1,5°C. Destacó las devastadoras consecuencias del cambio climático, sin dejar de ser optimista sobre la transición hacia una energía más limpia. Guterres pidió reducciones urgentes de emisiones y mercados de carbono justos, e instó a los países del G20 a trabajar juntos para apoyar a las economías emergentes. Insistió en la importancia de un acuerdo financiero sólido a favor de los países en desarrollo para evitar una gran catástrofe climática en el futuro.
En un conmovedor discurso en la Cumbre de Acción Climática de Líderes Mundiales en Bakú, Azerbaiyán, el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, advirtió sobre la cuenta regresiva final para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5°C. Recordando escenas de familias que huyen antes de que llegue el próximo huracán, biodiversidad destruida en mares sobrecalentados, trabajadores colapsando en un calor insoportable, inundaciones devastadoras y niños muriendo de hambre en sequías que devastan las cosechas, el Secretario General destacó la urgencia de la actual crisis climática.

Destacó que el cambio climático causado por el hombre estaba amplificando estos desastres y que ningún país se salvaría. Señaló a los más ricos como los principales culpables del problema, señalando que los multimillonarios más ricos emiten más carbono en una hora y media que la persona promedio en toda su vida.

Sin embargo, a pesar de este panorama sombrío, Guterres dijo que sigue siendo optimista sobre los esfuerzos globales para la transición a energías más limpias. Señaló que las inversiones en redes y energías renovables superaron por primera vez el año pasado las dedicadas a los combustibles fósiles. Además, destacó que la energía solar y eólica eran ahora las fuentes de electricidad más baratas en la mayoría de las regiones, y declaró que la revolución de la energía verde estaba realmente en marcha.

Guterres pidió a los delegados de la COP29 que se centren en reducir las emisiones, destacando que es imperativo limitar el calentamiento global y que las emisiones deben reducirse en un 9% cada año. También abogó por mercados de carbono justos, que respeten a las poblaciones locales sin acaparamiento de tierras ni “lavado verde”. Agregó que los planes de acción climática deben implementarse en la próxima conferencia climática en Brasil.

Guterres instó a los países del G20, los mayores emisores de gases de efecto invernadero y con mayores capacidades y responsabilidades, a colaborar para apoyar a las economías emergentes. Destacó la importancia de proteger a las poblaciones vulnerables de los efectos del cambio climático y pidió duplicar la financiación para la adaptación a al menos 40 mil millones de dólares por año para 2025.

En un llamamiento urgente, el Secretario General destacó que el mundo ya no puede postergar la financiación climática e insistió en que el tiempo se acaba. La cumbre COP29 en Bakú no debe concluir sin un acuerdo financiero sólido a favor de los países en desarrollo, en forma de financiación pública concesional, deuda baja y con palancas en la navegación, la aviación y la extracción de combustibles fósiles..

António Guterres concluyó su discurso enfatizando la urgencia de una acción colectiva para combatir el cambio climático. Destacó que el mundo debe invertir ahora para evitar una gran catástrofe climática en el futuro, enfatizando que en la cuestión de la financiación climática, «el mundo debe pagar, o la humanidad sufrirá las consecuencias».

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *