En el corazón del archipiélago de Cabo Verde se está produciendo una revolución agrícola sin precedentes que está transformando gradualmente unas tierras que, hace apenas cuatro años, luchaban por alimentar a sus habitantes. Este impulso de transformación, impulsado por la innovación y la infraestructura moderna, se destaca ahora como un símbolo tangible de progreso y renovación para la nación caboverdiana.
El verde hasta donde alcanza la vista es testigo de esta metamorfosis. Las tierras caboverdianas, que alguna vez fueron afectadas por una grave sequía, ahora disfrutan de una cosecha abundante, fruto de iniciativas audaces como la creación de estaciones de desalinización de agua de mar. Estos avances han permitido empoderar a los agricultores locales, ofreciendo nuevas perspectivas a quienes antes lo habían hecho. complementar sus ingresos por otros medios.
Aprobación Edy Simão describe el impacto significativo de estos cambios. Los esfuerzos para aumentar la producción y mejorar el acceso al agua representan una oportunidad real para los agricultores caboverdianos, ofreciéndoles la posibilidad de una existencia más segura y sostenible gracias a su actividad agrícola.
Cabo Verde, a través de importantes inversiones en diversificación de cultivos y desalinización de agua de mar, está preparado para convertirse en un modelo para la región. Al mismo tiempo, el establecimiento de un ambicioso sistema de seguro agrícola fortalecerá la estabilidad de las explotaciones agrícolas, creando así un entorno favorable al crecimiento y la prosperidad de los agricultores locales.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) apoya esta política agrícola visionaria y destacó en su 16ª reunión la importancia de la protección social para garantizar el desarrollo sostenible. Los representantes de la FAO insisten en que la protección social no debe verse como un gasto, sino como una valiosa inversión en capital humano.
A pesar de estos importantes avances, la cobertura de la protección social en África occidental sigue siendo limitada y solo llega al 13% de la población con al menos un servicio. Sin embargo, Cabo Verde se posiciona como un ejemplo de esperanza y éxito para la región, ofreciendo un modelo replicable y sostenible para el desarrollo agrícola y social en África Occidental.
En conclusión, la transformación agrícola de Cabo Verde ilustra un viaje inspirador hacia un futuro más rico, más sostenible y más próspero para la nación insular. Al optar por la innovación, la inversión en infraestructura y la protección social, Cabo Verde está allanando el camino hacia un futuro prometedor no sólo para sí mismo, sino para toda la región de África Occidental. Una lección de esperanza y éxito, hecha a medida para un futuro mejor.