Fatshimetrie: intensos enfrentamientos entre fuerzas armadas y rebeldes en Kivu del Norte
La situación en Kivu del Norte sigue siendo tensa, con intensos combates entre las fuerzas armadas y los rebeldes, que ponen en peligro la estabilidad de la región. Por segundo día consecutivo, las fuerzas leales y los rebeldes del M23 se enfrentaron en las aldeas de Hutuwe y Matembe, a unos sesenta kilómetros del centro de Lubero. Esta escalada de violencia se produce después de una breve pausa observada el día anterior en las aldeas de Kaseghe y Alimbongo.
El pueblo de Hutuwe, situado a unos veinte kilómetros de Kanyabayonga, es escenario de violentos enfrentamientos en los que las fuerzas armadas congoleñas intentan contener el avance de los rebeldes del M23. Los combates, concentrados principalmente en torno a los hutuwe, demuestran la determinación de ambos bandos de mantener el control del territorio. El teniente Reagan Mbuyi Kalonji, portavoz de las operaciones en el Frente Norte, confirma que las líneas del frente permanecen sin cambios, bajo el control de las FARDC.
Continúa el desplazamiento de poblaciones que huyen de las zonas de combate, agravando la crisis humanitaria en la región. Fuentes de la sociedad civil informan que los rebeldes lanzaron bombas cerca del hospital general de Alimbongo, lo que obligó a la evacuación de los pacientes a otras estructuras médicas más seguras. Esta situación de inseguridad compromete el acceso a la atención sanitaria de las poblaciones locales.
El conflicto en Kivu del Norte revela una vez más la fragilidad de la situación de seguridad en la República Democrática del Congo. Persisten los enfrentamientos entre las fuerzas armadas y los grupos rebeldes, lo que obstaculiza los esfuerzos de consolidación de la paz y desarrollo en la región. Es urgente que los actores políticos y militares entablen un diálogo constructivo para poner fin a esta escalada de violencia y trabajen juntos para estabilizar Kivu del Norte.
En conclusión, la situación en Kivu del Norte sigue siendo preocupante, con enfrentamientos persistentes entre las fuerzas armadas y los rebeldes del M23. La seguridad de las poblaciones civiles se ve amenazada, mientras la crisis humanitaria empeora. Es imperativo que se tomen medidas concretas para poner fin a esta violencia y garantizar la seguridad y el bienestar de los residentes de la región.