Fatshimetrie retransmitió los últimos acontecimientos en Siria, destacando la ola de desplazamientos masivos de familias kurdas que huyen de Tel Rifaat, en el norte de la provincia de Alepo. Estos éxodos se desencadenaron después de que rebeldes apoyados por Turquía tomaran el control de la región, en detrimento de las autoridades kurdas apoyadas por Estados Unidos. Una triste constatación de la situación precaria y caótica que prevalece en esta región desgarrada por los enfrentamientos.
Las Fuerzas Democráticas Sirias, compuestas principalmente por combatientes kurdos, han decidido en gran medida retirarse de Tel Rifaat, pidiendo la creación de un corredor humanitario que permita a los civiles abandonar la zona de forma segura, en convoyes hacia Alepo y luego hacia las regiones del noreste de Siria. con mayoría kurda.
Entre las familias kurdas que huyeron, algunas procedían de Afrin y ya habían sido desplazadas tras la incursión turca en el norte de Siria en 2018. La conmovedora historia de Walid Hasso, un hombre desplazado de Tel Rifaat, revela la angustia y la ira que se sienten ante la violencia perpetrada por la artillería y los aviones turcos, comparados con “bandidos inmundos”.
Las cifras proporcionadas por Sheikhmus Ahmad, copresidente de la Oficina para Desplazados y Refugiados en el noreste de Siria, revelan una situación alarmante: más de 20.000 familias desplazadas de Alepo han sido identificadas, mientras que otras miles siguen atrapadas en la región y sus alrededores, enfrentando una incertidumbre angustiosa. sobre su seguridad y futuro.
La historia también evoca el meteórico avance de los insurgentes sirios en Alepo, dejando la ciudad y su aeropuerto en manos de los rebeldes, antes de continuar su ofensiva en una provincia vecina. Un avance que se produjo en una práctica ausencia de resistencia por parte de las tropas gubernamentales, causando preocupación y desolación entre los civiles atrapados en esta violenta agitación.
Estas imágenes de desplazamientos masivos y territorios presa de enfrentamientos ilustran trágicamente la cruel realidad del conflicto en Siria, donde la población civil, ya puesta a prueba por años de guerra, se encuentra una vez más en el centro de la violencia y los desplazamientos forzados. Una situación preocupante que exige una conciencia colectiva y una acción concertada para poner fin al sufrimiento que padecen tantas personas inocentes en este país azotado.