**Ciclón Chido: una tragedia devastadora para Mayotte y más allá**
El ciclón Chido será tristemente recordado como uno de los peores desastres naturales que ha azotado Mayotte en casi un siglo. La devastación provocada por esta tormenta sumió a la isla en el caos y la desolación, dejando tras de sí un paisaje de destrucción y dolor.
Cuando el ciclón Chido azotó Mayotte el 14 de diciembre, con vientos que alcanzaron hasta 260 km/h y 250 mm de lluvia en sólo 24 horas, dejó tras de sí una estela de destrucción sin precedentes. Comunidades enteras quedaron reducidas a ruinas, dejando a los supervivientes en la indigencia, sin agua, electricidad ni comunicaciones durante más de una semana.
El costo humano es elevado: se ha confirmado la muerte de al menos 31 personas y miles más están desaparecidas. Las autoridades temen que el número de víctimas pueda aumentar a varios cientos, o incluso miles, mientras continúan las operaciones de socorro para encontrar supervivientes y proporcionar ayuda de emergencia a las poblaciones afectadas.
Mayotte, el territorio más pobre de Francia, se vio duramente afectado por esta catástrofe debido a la precariedad de muchas viviendas que fueron arrasadas por la tormenta. La situación es crítica y la urgencia es responder a las necesidades inmediatas de las poblaciones afectadas, considerando al mismo tiempo una reconstrucción a largo plazo para devolver la esperanza y la dignidad a las víctimas de esta tragedia.
Se está organizando solidaridad en todo el país para apoyar a Mayotte en esta terrible experiencia. Se rinden homenajes en grandes ciudades como París, Marsella y Lyon, y las banderas francesas ondean a media asta en señal de duelo y apoyo a las víctimas del ciclón Chido.
Pero la tormenta no se detuvo en Mayotte. Continuó su devastadora trayectoria afectando a África, causando la muerte de al menos 94 personas en Mozambique y causando importantes daños en Malawi y Zimbabwe. El costo humano y material de este desastre es considerable, lo que recuerda la vulnerabilidad de las poblaciones a las fuerzas de la naturaleza.
El ciclón Chido destaca la urgencia de fortalecer la preparación para desastres naturales y apoyar a las comunidades más expuestas a los riesgos climáticos. Pide una mayor solidaridad internacional para ayudar a los países y territorios afectados a recuperarse y reconstruirse, en un espíritu de cooperación y resiliencia frente a los desafíos del cambio climático.
En este momento de duelo y reconstrucción, recordemos que la solidaridad y la ayuda mutua son las claves para superar los peores desafíos y construir un futuro más seguro y unido para todos. Que se honre la memoria de las víctimas del ciclón Chido a través de nuestro compromiso compartido de proteger nuestro planeta y cuidarnos unos a otros en tiempos difíciles.