Fatshimetrie: el estallido de un escándalo político
El reciente asunto en torno a Bashir Hadejia ha sacudido las esferas del poder político en Nigeria, provocando demandas apremiantes de rendición de cuentas por parte de las autoridades. El arresto de Hadejia por «traición y subversión contra el Estado» provocó una verdadera conmoción, alimentada por vídeos y fotografías que lo mostraban junto a figuras influyentes, lo que alimentó las demandas públicas de una investigación exhaustiva.
Hadejia, una figura familiar en los pasillos del poder y estrecho colaborador del ex gobernador del estado de Zamfara, Matawalle, se vio repentinamente impulsado a la vanguardia de la escena mediática. La difusión de un breve vídeo que lo muestra mostrando lo que parece ser una barra de oro grabada con la imagen del ex líder libio Muammar Gaddafi ha amplificado las preguntas.
En este vídeo de 14 segundos, Hadejia declara con orgullo: «Una tonelada, 24 quilates en total, 1 kg. En cada caja tenemos 50 kg; en total tenemos una tonelada». Las 13 cajas con el sello «Banco Central de Libia», supuestamente llenas de lingotes de oro, arrojan dura luz sobre las conexiones y prácticas cuestionables de Hadejia.
Una foto ampliamente compartida lo muestra junto a Matawalle entregando lingotes de oro al expresidente Muhammadu Buhari en 2020, lo que refuerza las sospechas sobre su influencia y conexiones en los niveles más altos del gobierno. Las reuniones de Hadejia con figuras como el jefe de gabinete del presidente, Femi Gbajabiamila, el asesor de seguridad nacional, Nuhu Ribadu, y el ministro de Defensa, Mohammed Badaru, pusieron de relieve sus poderosas conexiones en las altas esferas del poder.
La respuesta positiva del grupo Ciudadanos Unidos Contra el Terrorismo (CUAT) al arresto de Hadejia destacó sus presuntas actividades como traficante de armas y delincuente transfronterizo. El grupo elogió a las fuerzas de seguridad por su acción y pidió una investigación exhaustiva sobre los cómplices de Hadejia, incluidos aquellos dentro del gobierno.
Además, las acusaciones vinculan a Hadejia con las protestas #EndBadGovernance destinadas a desestabilizar al gobierno, destacando una conspiración más grande de lo que se imaginaba anteriormente. El Dr. Emmanuel Agabi de la CUAT destacó la necesidad de procesar y juzgar a los instigadores de este presunto complot para desestabilizar a la nación.
Por tanto, el caso Hadejia representa mucho más que un simple arresto. Destaca las conexiones opacas y las intrigas políticas que plagan los pasillos del poder. La investigación en curso debe identificar y llevar ante la justicia a los responsables de estas acciones, a fin de garantizar la transparencia y la integridad necesarias para el correcto funcionamiento de la democracia en Nigeria.