A principios de septiembre, una figura importante del gobierno congoleño llamó la atención al viajar a Kasai con motivo del inicio del año escolar 2024-2025. Se trata de Raïssa Malu, Ministra de Estado encargada de Educación Nacional y Nueva Ciudadanía. Su estancia en Tshikapa, capital de la provincia de Kasaï, demuestra la importancia concedida a este momento crucial del año educativo.
A su llegada, Raïssa Malu se implicó activamente participando en una sesión de trabajo con el gobierno provincial, encabezada por el vicegobernador Bokele Djo Ley. Esta reunión preliminar muestra la voluntad política para coordinar acciones a favor de la educación en esta región.
La ceremonia oficial de regreso a clases, prevista para el 2 de septiembre en el Lycée Tshikunga, en Dibumba 2, estará presidida por Raïssa Malu. Este evento marca el inicio de un nuevo año escolar, pero también plantea interrogantes sobre la participación de los sindicatos de docentes. De hecho, algunos de ellos amenazan con boicotear este regreso a clases, argumentando que sus demandas no han sido escuchadas por el gobierno.
Esta situación pone de relieve los desafíos que enfrenta el sistema educativo congoleño. Entre las crecientes necesidades en términos de infraestructura, recursos educativos y condiciones laborales de los docentes, el sector educativo requiere especial atención. Por lo tanto, la Ministra Raïssa Malu se encuentra en una encrucijada crucial, donde su compromiso y su capacidad de dialogar con las distintas partes interesadas serán decisivos para el futuro de la educación en Kasai y más allá.
Más allá del acontecimiento puntual del inicio del año escolar, lo que está en juego es toda la cuestión del acceso a una educación de calidad para todos los niños congoleños. La presencia de Raïssa Malu en Kasaï representa un fuerte símbolo, pero también una llamada. a la acción para responder a los desafíos educativos que enfrenta el país.
En conclusión, la visita de Raïssa Malu a Kasaï con motivo del inicio del curso escolar pone de relieve la importancia de la educación como palanca de desarrollo. También es un recordatorio de la necesidad de una movilización colectiva para garantizar a todos los niños congoleños el acceso a una educación de calidad, vector de emancipación y futuro.