En el mundo del hip-hop, es raro no conocer a Sean «Diddy» Combs, alguna vez el extravagante empresario al que se le atribuye la comercialización del género. Sin embargo, su notoriedad ha disminuido significativamente en los últimos tiempos, debido a una serie de acusaciones de tráfico sexual y demandas por agresión.
El arresto del magnate de la música en Nueva York esta semana se produce tras una redada orquestada en marzo por agentes federales armados en sus propiedades de lujo en Miami y Los Ángeles, lo que sugiere que estaba siendo investigado. Se espera que hoy se revelen los detalles de los cargos contra Combs.
El arresto y la redada de alto perfil en sus casas marcan una rápida caída del poderoso magnate que en los últimos años ha tratado de reposicionarse como «Brother Love».
Fundador del sello Bad Boy en 1993, a quien le debemos el descubrimiento de talentos como el desaparecido Notorious B.I.G. y Mary J. Blige, se le atribuye haber llevado el hip hop a la corriente principal.
A lo largo de las décadas, el artista, conocido por varios nombres como Puff Daddy y P Diddy, ha acumulado una inmensa riqueza, sobre todo gracias a sus actividades en la industria del alcohol.
A pesar de sus esfuerzos por cultivar una imagen de rey del partido y magnate de los negocios, varias demandas retratan a Combs como un hombre violento que utilizó su celebridad para aprovecharse de sus víctimas.
Aunque nunca fue condenado por delitos graves, siempre le siguieron acusaciones de agresión física, que se remontan a la década de 1990.
La cascada de acusaciones comenzó a fines del año pasado cuando la cantante Cassie, nombre real Casandra Ventura, alegó que Combs la sometió a más de una década de coerción mediante fuerza física y drogas, así como a una violación en 2018.
La sorprendente denuncia se resolvió rápidamente fuera de los tribunales, pero siguieron una serie de denuncias de agresión sexual igualmente sórdidas, incluida una de una mujer en diciembre que alegaba que Combs y otros la violaron en grupo cuando tenía 17 años.
En mayo surgieron inquietantes imágenes de vigilancia de un altercado físico entre Combs y su exnovia Ventura en 2016, que corroboraron las acusaciones de esta última en el caso ahora cerrado.
Combs se disculpó después de que apareció el video, calificando su comportamiento de «imperdonable» y diciendo que «buscó ayuda profesional» después del incidente.
El rapero también enfrenta una serie de demandas civiles que lo retratan como un depredador sexualmente violento que usaba alcohol y drogas para dominar a sus víctimas.
Ha rechazado enérgicamente las acusaciones en el pasado, diciendo que los acusadores simplemente buscaban ganancias financieras..
Nacido como Sean John Combs el 4 de noviembre de 1969 en Harlem, el artista se inició en la industria como pasante en 1990 en Uptown Records, donde finalmente se convirtió en gestor de talentos.
Se ganó una reputación como maestro de ceremonias, una parte central de su marca a medida que crecía su fama.
En 1991, organizó un partido de baloncesto y un concierto de celebridades en el City College de Nueva York que provocaron nueve muertes durante una estampida.
El evento superó la capacidad por miles y dio lugar a una serie de demandas, en las que se culpó a Combs de contratar seguridad insuficiente.
Lo despidieron de Uptown y fundó su propio sello, Bad Boy Records.
Así comenzó un rápido ascenso a la cima del hip-hop de la costa este.
Su discípulo The Notorious B.I.G. Se convirtió en el rey del hip-hop tras el lanzamiento de su icónico álbum debut «Ready to Die» en 1994, hasta su impactante asesinato en 1997.
Combs se ha rodeado de varios artistas importantes y ha colaborado en producciones con artistas como Blige, Usher, Lil’ Kim, TLC, Mariah Carey y Boyz II Men.
También ganó un Grammy como rapero con su sencillo número uno «Can’t Nobody Hold Me Down» y su álbum «No Way Out».
El sencillo «I’ll Be Missing You» fue un tributo a Biggie y un éxito instantáneo, junto con otros éxitos importantes como «It’s All About The Benjamins» y «Been Around the World».
Estableció una imagen de gran apostador descarado con una actitud sin límites, un importante productor que también incursionó en Hollywood, los reality shows y la moda, y que tenía vínculos románticos de alto perfil con personajes como Jennifer López.
Durante más de una década, a partir de 1998, sus fastuosas Fiestas Blancas fueron el evento imperdible en el circuito de fiestas de la cultura popular.
En los últimos años, cambió legalmente su segundo nombre a Love, lanzó «The Love Album: Off the Grid», se involucró más en la filantropía y se presentó ante los medios como un hombre más sabio en su «Era del Amor».