El trágico hundimiento de un barco ballenero en el río Kwango, en el Congo, en septiembre de 2019 sacudió a la comunidad local, dejando a doce personas sin vida y a muchas otras afectadas por esta desgarradora tragedia. Según la información reportada, las autoridades confirmaron la muerte de doce personas, acompañadas de seis heridos y la desaparición de cuarenta personas, dejando tras de sí una ola de tristeza y dolor.
El Ministro provincial de Salud, Dr. Apollinaire Yumba, hizo un balance desgarrador de esta tragedia, precisando que actualmente once heridos están siendo atendidos en el lugar de la tragedia. Los servicios de emergencia se desplegaron rápidamente para ayudar a los heridos, mientras que las autoridades provinciales brindaron apoyo en términos de medicamentos y socorro a los supervivientes.
Entre los heridos graves se encontraba un conductor al que hubo que amputarle el miembro superior izquierdo. Los equipos médicos en el lugar trabajaron las 24 horas del día para brindar tratamiento a las víctimas, mientras que un niño de siete años con una fractura de fémur derecho fue transportado al Hospital General de Kenge para recibir el tratamiento adecuado.
La comunidad y las autoridades locales se están movilizando para apoyar a los supervivientes y a las familias en duelo, proporcionando un apoyo esencial en estos tiempos oscuros. La solidaridad y la ayuda mutua están en el centro de la respuesta a esta tragedia, recordando la fuerza y la resiliencia de las personas frente a la adversidad.
Este trágico naufragio en el río Kwango es un conmovedor recordatorio de la fragilidad de la vida y de la necesidad de actuar juntos para evitar tragedias similares en el futuro. En este momento de duelo y reconstrucción, unamos fuerzas para apoyar a las víctimas y trabajar por un futuro más seguro y humano.