En un contexto en el que las tensiones entre Israel y Hamás hacen estragos en la Franja de Gaza, en Estados Unidos se está alzando una voz discordante. El presidente estadounidense, Joe Biden, no apoya plenamente los objetivos de Israel en su guerra contra Hamás, según el ministro de Seguridad Nacional israelí de extrema derecha, Itamar Ben Gvir, citado por el Wall Street Journal.
Según Ben Gvir, en lugar de apoyarnos plenamente, Biden está centrando su atención en la ayuda humanitaria y el suministro de combustible a Gaza, lo que en última instancia beneficia a Hamás. «Si Trump estuviera en el poder, la posición estadounidense sería totalmente diferente», añadió.
Estos comentarios provocaron fuertes reacciones en Israel. Benny Gantz, ex ministro de Defensa y miembro del gabinete de guerra de Israel, calificó los comentarios de Ben Gvir de «irresponsables» en una publicación en X, instando a Netanyahu a «llamarlo al orden». “Está permitido tener diferencias, incluso con nuestro mayor y más importante aliado (Estados Unidos), pero deben expresarse en los foros apropiados y no a través de declaraciones irresponsables en los medios de comunicación, que dañan las relaciones estratégicas del Estado de Israel. , su seguridad y el esfuerzo bélico en curso», dijo.
El líder de la oposición, Yair Lapid, también criticó los comentarios de Ben Gvir sobre X, diciendo que la entrevista fue «un ataque directo al estatus internacional de Israel, un ataque directo al esfuerzo bélico, perjudicial para la seguridad de Israel y, sobre todo, demostrando que no entiende nada sobre la política exterior.
Netanyahu está bajo presión de todos lados, mientras las divisiones dentro de su coalición y su gabinete de guerra amenazan con conducir al colapso del gobierno, mientras grandes protestas en todo el país exigen su renuncia y convocan a nuevas elecciones.
Esta compleja situación pone de relieve la necesidad de mantener canales de comunicación abiertos y encontrar soluciones diplomáticas para poner fin a la violencia y encontrar una paz duradera en la región. La posición de Joe Biden parece ser la de un mediador, que busca aliviar las tensiones y promover una resolución pacífica del conflicto.
A pesar de las críticas internas, es crucial que Israel mantenga una relación sólida con Estados Unidos, su mayor aliado, mientras trabaja para equilibrar las expectativas de la comunidad internacional y los intereses nacionales.
En conclusión, está claro que los acontecimientos recientes han puesto de relieve los desafíos que enfrenta Israel en su lucha contra Hamás, así como las diferencias de opinión dentro de la comunidad internacional. Es esencial garantizar que los desacuerdos se manejen de manera responsable y con respeto por los intereses de todas las partes involucradas.. El camino hacia la paz y la estabilidad en la región requiere debates abiertos y constructivos, así como voluntad de buscar soluciones diplomáticas.