**Más de 3.000 niños en el territorio de Nyiragongo, en la provincia de Kivu Norte del Congo, recibieron recientemente certificados de nacimiento gracias a una loable iniciativa de la ONG Movimiento Internacional por los Derechos de los Niños y las Mujeres, los hombres viudos y su promoción social (MIDEFEHOPS ), con el apoyo financiero de UNICEF.**
La importancia de este acto administrativo va mucho más allá de su simple materialidad. De hecho, la posesión de un certificado de nacimiento no es simplemente una formalidad administrativa, sino un derecho fundamental de todo individuo. Es un documento imprescindible que certifica la existencia legal de una persona, garantizándole así el acceso a otros derechos como educación, salud, nacionalidad y más.
Este enfoque de la ONG MIDEFEHOPS y sus socios es un valioso paso adelante para garantizar a los niños de Nyiragongo una existencia oficial y el reconocimiento de su identidad. De hecho, el riesgo de apatridia, es decir, de no ser reconocido como ciudadano de su propio país, es una grave amenaza para muchos niños en todo el mundo.
La ceremonia de entrega de las partidas de nacimiento, que se celebró en una escuela primaria de Munigi, constituye un fuerte momento simbólico, que pone de relieve la importancia del acceso a la identidad de cada niño. Para estos más de 3.000 escolares, este documento administrativo es mucho más que un simple papel: es una puerta abierta a un futuro más seguro y prometedor.
Es crucial subrayar el papel esencial de los actores locales de la sociedad civil, como Jean-Etienne Bosenibamwe, que trabajan a diario para defender los derechos de los más vulnerables. Su compromiso y dedicación son esenciales para promover los derechos de los niños y garantizar un futuro mejor para todos.
En conclusión, la entrega de estos certificados de nacimiento a más de 3.000 niños en Nyiragongo es un paso significativo en la protección de los derechos fundamentales de los niños. También es un recordatorio conmovedor de la necesidad de continuar los esfuerzos para garantizar a todos, sin excepción, el acceso a una identidad jurídica y la protección de sus derechos fundamentales.