En las últimas noticias de la República Democrática del Congo, un anuncio muy importante llamó la atención de todos: el Jefe de Estado, Félix-Antoine Tshisekedi, se comprometió firmemente a apoyar la implementación de las resoluciones de los Estados Generales de Justicia. Este trabajo, que duró diez días, finalizó el sábado 16 de noviembre en el Palacio del Pueblo, sugiriendo perspectivas de importantes reformas para el sistema judicial congoleño.
El objetivo inicial de estos encuentros era claro: hacer un diagnóstico de los males que socavan la justicia en la República Democrática del Congo y proponer soluciones radicales para remediarlos. En total, se adoptaron nada menos que 359 recomendaciones, encabezando la lista el espinoso tema de la reestructuración del Consejo Superior de la Judicatura.
Sin embargo, surgió una viva controversia tras la sugerencia de sustituir esta institución por el Consejo Superior de Justicia, presidido por el Jefe de Estado o por el Ministro de Justicia en caso de incapacidad presidencial. Este cambio no dejó de suscitar reacciones de rechazo por parte de los sindicatos de magistrados, representados por una voz autorizada: Edmond Isofa, presidente del Sindicato Autónomo de Magistrados y fiscal. Expresó su descontento con el resultado de los trabajos y anunció una posición unánime de los sindicatos en las próximas horas.
Las declaraciones de Edmond Isofa fueron difundidas por los medios de comunicación, expresando así la divergencia de opiniones dentro de la comunidad judicial congoleña. Sin embargo, algunos actores del sistema judicial acogieron con satisfacción las recomendaciones formuladas durante estas asambleas generales, como el inspector general de los servicios judiciales y penitenciarios, Constant Mutamba, que se felicita del fortalecimiento de su papel y de sus prerrogativas. Según él, ampliar el poder de control del inspector a todos los niveles de los servicios judiciales es un paso necesario para garantizar la eficiencia y la equidad del sistema judicial congoleño.
Al mismo tiempo, los abogados también expresaron cierto alivio, en particular con respecto al apoyo del abogado pro deo, que garantiza asistencia jurídica gratuita a los más necesitados. Esta resolución, bienvenida por abogados comprometidos como John Kavota, demuestra un claro deseo de hacer que la justicia sea más accesible y equitativa para todos los ciudadanos de la República Democrática del Congo.
Estas animadas discusiones y debates durante las asambleas generales de justicia en la República Democrática del Congo ilustran el deseo de introducir reformas profundas y necesarias para restaurar la confianza en un sistema judicial a menudo señalado por su falta de eficiencia e imparcialidad.. Ahora corresponde a las autoridades, magistrados, abogados y todos los actores de la justicia congoleña implementar estas resoluciones en un espíritu de consulta y diálogo, para construir juntos un sistema judicial más justo y transparente al servicio de todos los ciudadanos de la República Democrática del Congo.