Una manifestación histórica tuvo lugar en la ciudad de Agadez, Níger, donde cientos de manifestantes exigieron la salida de las tropas estadounidenses estacionadas en el país. La movilización fue organizada por grupos de la sociedad civil en respuesta a la decisión de Estados Unidos de retirar sus soldados, tras la denuncia de acuerdos de cooperación militar por parte de las autoridades nigerinas.
La noticia de la inminente retirada de las tropas estadounidenses fue recibida con alivio por los manifestantes en Agadez, quienes no percibieron beneficios tangibles de la presencia militar durante los últimos doce años. La falta de proyectos de desarrollo significativos, como la construcción de escuelas e instalaciones de agua, ha llevado a los residentes de Agadez a pedir la partida de las tropas extranjeras.
Slimane Ibrahim, tercer vicepresidente del comité regional de apoyo a las autoridades, destacó la importancia de que la seguridad de Níger sea responsabilidad de sus ciudadanos y no de fuerzas extranjeras. Además, subrayó que la población nigerina busca asociaciones centradas en el desarrollo económico en lugar de en alianzas militares.
La retirada de las tropas estadounidenses coincidió con la llegada de instructores rusos a Níger, lo que refleja la voluntad de las autoridades nigerinas de diversificar sus relaciones internacionales y fortalecer su soberanía. La inminente visita de funcionarios estadounidenses para finalizar el plan de retirada destaca la importancia de gestionar esta transición de manera pacífica y respetuosa con todos los involucrados.
En resumen, la manifestación en Agadez a favor de la salida de las tropas estadounidenses refleja el deseo de los nigerinos de tomar el control de su destino y enfocarse en la soberanía nacional y el desarrollo económico. Este acontecimiento marca un hito en las relaciones internacionales de Níger y abre nuevas oportunidades para una cooperación constructiva con la comunidad internacional.