Los Estados Generales de Bosques de la República Democrática del Congo (RDC) clausuraron el martes 23 de enero en Kinshasa, reuniendo a cerca de 350 participantes. Esta reunión de cinco días fue una oportunidad para discutir cuestiones relacionadas con la gestión sostenible de los bosques congoleños y formular recomendaciones para implementar una política forestal adecuada.
Los participantes, provenientes de diferentes regiones del país, resaltaron la importancia de proteger la biodiversidad y promover una gobernanza forestal efectiva. También pidieron fortalecer las capacidades de las instituciones responsables de la gestión forestal y garantizar que el sector forestal contribuya a los ingresos públicos para el bienestar de la población congoleña.
En su discurso de clausura, la Ministra de Estado encargada de Medio Ambiente, Eve Bazaiba, agradeció a todos los participantes por la calidad del trabajo realizado durante estas asambleas generales. También instó a los participantes a participar activamente en la implementación de las recomendaciones formuladas durante esta reunión.
La organización de estas declaraciones generales fue posible gracias a la contribución de numerosos socios técnicos y financieros, en particular el CAFI (programa de gestión forestal sostenible). Desde 2009, la República Democrática del Congo se ha comprometido a reducir las emisiones relacionadas con la deforestación y la degradación forestal.
Estos debates sobre la gestión forestal en la República Democrática del Congo son cruciales, ya que el país tiene una de las mayores extensiones de bosque del mundo y alberga una biodiversidad única. Establecer una política forestal adecuada es esencial para preservar estos recursos naturales y garantizar un futuro sostenible para las comunidades locales y el planeta.
En conclusión, las declaraciones generales sobre los bosques en la República Democrática del Congo ayudaron a resaltar la importancia de la ordenación forestal sostenible y a formular recomendaciones para guiar la política forestal del país. Ahora es esencial que estas recomendaciones se implementen de manera efectiva, con la participación de todas las partes interesadas, para garantizar la preservación de los bosques congoleños y el bienestar de la población.