El mercado central de Kinshasa, comúnmente conocido como «Zando», debía abrir sus puertas a finales de noviembre de 2023, según anuncios de las autoridades locales. Sin embargo, a pesar de las promesas hechas por el gobernador Gentiny Gobila Mbaka y el presidente de la asamblea provincial, Godé Mpoyi Kadima, no se ha fijado una fecha precisa para la toma de posesión. Esta expectativa plantea muchas preguntas entre los residentes de Kinshasa.
El proyecto de construcción del mercado central, valorado en 35 millones de dólares y llevado a cabo por la empresa francesa SOGEMA, debía permitir la creación de un espacio moderno con capacidad para albergar a más de 500.000 personas. El mercado debía incluir tiendas, bistrós, un dispensario, zonas para bomberos y bancos, así como instalaciones sanitarias que cumplieran los requisitos exigidos.
Los anuncios sobre la inminente apertura del mercado se han multiplicado a lo largo de los meses. En marzo de 2022, el presidente de la asamblea provincial Godé Mpoyi aseguró que el mercado estaría abierto antes de que finalizara este mandato. En agosto de 2023, el gobernador Gentiny Ngobila confirmó que la inauguración tendría lugar antes del 30 de noviembre de 2023.
Sin embargo, a pesar de estas declaraciones, las obras de construcción del mercado central aún no han concluido. Esta situación despertó el interés de la Inspección General de Finanzas (IGF), que solicitó aclaraciones sobre la marcha del proyecto.
Ante esta espera interminable, los habitantes de Kinshasa se impacientan. Sin embargo, es importante recordar que construir un proyecto de este tipo requiere tiempo y planificación. La prioridad debe ser garantizar que las obras se realicen según los estándares y que el mercado sea funcional y seguro para los usuarios.
Por tanto, es fundamental mantener una comunicación transparente con la población para informarles periódicamente sobre el avance del proyecto y sus posibles retrasos. Además, las autoridades deben garantizar que se tomen todas las medidas de seguridad para evitar cualquier incidente una vez que se abra el mercado.
En conclusión, aunque la apertura del nuevo mercado «Zando» en Kinshasa está muy retrasada, es importante recordar que la construcción de un proyecto de este tipo requiere tiempo y rigor. Las autoridades deben seguir trabajando para garantizar que el mercado esté preparado para acoger a los residentes de Kinshasa en las mejores condiciones posibles.