“Gaza: una tragedia humana sin precedentes y una destrucción despiadada”

Gaza: una tragedia humana y una destrucción sin precedentes

Desde el 7 de octubre, la ciudad de Gaza ha sido escenario de un verdadero apocalipsis. Los residentes, atrapados en esta pesadilla, viven con el temor constante de los bombardeos israelíes. Las imágenes de destrucción y violencia que surgen de este enclave palestino, único en su tipo, recuerdan las peores horas de la historia. Israel afirma estar llevando a cabo una operación militar para destruir la red de túneles de Hamás, pero va mucho más allá. Se lanzaron más de 25.000 toneladas de bombas sobre esta delgada franja costera, transformando la ciudad de Gaza en un campo de ruinas.

Según Al Jazeera, alrededor de un tercio de las 220.000 viviendas dañadas, de las cuales 40.000 destruidas, se encuentran en esta conurbación densamente poblada de dos millones de habitantes. El ejército israelí afirma utilizar bombas inteligentes para preservar vidas civiles, pero la evidencia muestra que estos ataques también tienen como objetivo instalaciones civiles como hospitales, escuelas, infraestructura hídrica y mezquitas. Esto plantea dudas sobre las verdaderas motivaciones de esta operación más allá de la destrucción de Hamás.

La justificación para el uso militar de hospitales desafiando los Convenios de Ginebra es una excusa muy débil. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha afirmado que el hospital Al-Shifa era un centro de mando de Hamás, pero la evidencia que respalda esta afirmación es débil. Es inaceptable destruir un hospital, asaltarlo y ocupar secciones del mismo durante 10 días, privando a los médicos de sus medios de comunicación y arrestando a los pacientes. Las Naciones Unidas ya han informado de 219 casos de violencia contra hospitales por parte de las fuerzas armadas israelíes en Gaza, así como 10 casos en Israel.

Las pérdidas humanas de Hamás tampoco son significativas. A pesar de la estimación inicial de 30.000 combatientes en las Brigadas Izz al-Din al-Qassam, el grupo perdió sólo a unos pocos de sus líderes. Por tanto, es razonable preguntarse si esta guerra tiene algún otro objetivo que la venganza y la restauración de la imagen del ejército israelí. Algunos analistas sugieren que uno de los principales objetivos es provocar un éxodo masivo de la población palestina de Gaza creando un clima de terror y destruyendo infraestructuras vitales.

Esta situación desesperada ha empujado a cientos de miles de personas a buscar refugio donde pueden, huyendo constantemente de un lugar a otro sin encontrar respiro. Las imágenes de refugiados desesperados que huyen de una zona a otra se han vuelto comunes en las redes sociales. Los habitantes de Gaza están sufriendo una verdadera prueba, víctimas del desamparo colectivo frente a fuerzas mucho más poderosas.

Es difícil no ver algo de ironía en esta terrible situación.. Mientras el profeta Jeremías lamentaba la destrucción de Jerusalén por los babilonios, hoy somos testigos de una tragedia similar en Gaza, perpetrada por quienes reivindican la misma tradición. Es hora de que el mundo se movilice para poner fin a esta violencia incesante y evitar que Gaza se convierta en un recuerdo más en las páginas oscuras de la historia.

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