En la región de Kalemie, una situación preocupante afecta actualmente a los operadores económicos locales. En efecto, más de 80 vagones de mercancías pertenecientes a distintos empresarios de Maniema están atrapados desde hace cinco meses en los almacenes de la Société Nationale des Chemins de fer du Congo (SNCC). Esta inmovilización de mercancías se debe principalmente a la interrupción del tráfico ferroviario tras el hundimiento del puente Lwizi, situado entre los territorios de Kabalo y Nyunzu, en la provincia de Tanganica.
Diversos productos se ven afectados por este problema, desde alimentos como la sal, el azúcar, la harina de trigo, hasta productos industriales como la sosa cáustica, los sacos de cemento y los materiales de construcción. Esta situación coloca a los operadores económicos en una situación delicada, sobre todo porque la ciudad de Kalemie está sufriendo actualmente inundaciones debido a la crecida del lago Tanganica. Existe un temor legítimo respecto de la conservación de estos bienes en tal contexto.
Las autoridades de la Federación de Empresas Congolesas en Maniema expresan su preocupación por la situación y cuestionan al SNCC sobre la necesidad de actuar con rapidez para evitar cualquier daño a las mercancías almacenadas. Sin embargo, SNCC afirma que ya se ha cargado una carga en vagones a la espera de que se reanude el tráfico para ser transportada a su destino final. Mientras tanto, el director de la región de los Grandes Lagos de SNCC anima a los clientes a retirar sus mercancías de los almacenes de la empresa para evitar cualquier riesgo relacionado con inundaciones u otros peligros.
De hecho, algunos comerciantes siguieron estas recomendaciones y tomaron medidas para recuperar sus mercancías. Sin embargo, otros prefieren esperar a una reanudación efectiva del tráfico ferroviario antes de actuar. Esta delicada situación pone de relieve los desafíos logísticos y económicos que enfrentan los operadores económicos de la región y subraya la necesidad de una gestión eficaz de la infraestructura de transporte para garantizar la fluidez del comercio. Esperemos que se encuentren soluciones rápidas y adecuadas que permitan reanudar las rotaciones de trenes y el transporte de estas mercancías hasta su destino final.