El estadio estaba vibrante el 1 de junio de 2024 cuando se disputaban los octavos de final de la Copa de Fútbol del Congo. Los espectadores estaban entusiasmados, listos para apoyar a su equipo favorito en esta codiciada competencia. A medida que avanzaban los encuentros, la emoción no hacía más que crecer, ofreciendo momentos intensos e impredecibles.
La Asociación Deportiva Victoria Club dejó su huella al aplastar al FC Tempête con un claro marcador de 4 goles a cero. Los jugadores, decididos y listos, ofrecieron un espectáculo de primer nivel, con nada menos que cuatro goleadores diferentes. Bajo la dirección del seleccionador Abdeslam Ouaddou, los verdinegros de la capital no dejaron ninguna posibilidad a su rival de Bunia, asegurando así con garbo su clasificación.
Por su parte, el Daring Club Virunga se distinguió al infligir una dura derrota al CS Imana por 4-0. Los jugadores, impulsados por su pasión por el fútbol, ofrecieron un partido dinámico e impactante, con un doblete de Cédric Lisele que dejó huella.
En el estadio Goma Unity, el FC Tshikas de Mbuji-Mayi proporcionó el mínimo servicio contra el equipo del FC Beni Union, ganando por un ajustado marcador de 1-0. En un tenso encuentro, cada equipo libró una feroz batalla para clasificarse para los cuartos de final.
Finalmente, el FC Nouvelle Vie Bomoko de Kinshasa triunfó sin siquiera pisar el terreno de juego, tras la ausencia de la Entente Sportive Uele. Una clasificación atípica que permitirá al club capitalino continuar su camino en la competición.
Estos resultados crearon una atmósfera eléctrica, propicia para la aparición de nuevos talentos y la afirmación de los equipos en el panorama del fútbol congoleño. La afición vibró al ritmo de las hazañas de los jugadores, que demostraron todo su talento y determinación sobre el terreno de juego.
Los octavos de final ofrecieron un espectáculo inolvidable, combinando suspenso, pasión y adrenalina. Los equipos clasificados ahora pueden prepararse para los próximos desafíos que les esperan en los cuartos de final, con la esperanza de ganar la preciosa Copa del Congo y hacer historia en el fútbol congoleño.