**Fatshimetrie: El juicio de los atentados de Kinshasa ante el tribunal militar de Ndolo**
El tercer día del juicio relativo a los ataques ocurridos el 19 de mayo contra la residencia de Vital Kamerhe, presidente de la Asamblea Nacional, y el Palacio de la Nación en Kinshasa, reunió a 51 acusados en la prisión militar de Ndolo. Esta sesión estuvo marcada por el examen de los “escritos únicos”, documentos esenciales que resumen los argumentos, hechos y cuestiones de derecho de cada parte involucrada.
La audiencia puso de relieve los debates en torno a las excepciones planteadas por los acusados, lo que llevó a una deliberación por parte de los jueces sobre todas las objeciones planteadas. Esta etapa preparatoria es crucial para permitir un análisis en profundidad de las solicitudes de los demandados. La reanudación del juicio está prevista para el 25 de junio, con el fin de continuar el examen de los escritos únicos y continuar los debates en curso.
Las solicitudes de los acusados fueron variadas: algunas se referían a una posible libertad provisional en espera de la continuación del proceso, mientras que otras cuestionaban la validez de los informes elaborados anteriormente. También se plantearon cuestiones de legitimidad, incluida la jurisdicción competente para juzgar a los civiles involucrados en el caso, poniendo en duda la competencia del tribunal militar.
El fiscal se opuso a estas solicitudes y pidió que se mantuviera detenidos a los acusados dada la gravedad de los cargos que se les imputaban. El tribunal dictará una decisión provisional, denominada «sentencia previa a la sentencia», para pronunciarse sobre las solicitudes de los acusados, en particular en lo que respecta a la solicitud de libertad provisional. Esta decisión será decisiva para la continuación del juicio y la posibilidad de que el acusado se beneficie de medidas alternativas a la detención.
En conclusión, el juicio de los atentados de Kinshasa ante el tribunal militar de Ndolo sigue generando intensos debates y grandes cuestiones jurídicas. El resultado de este caso tendrá un impacto significativo en la justicia y la estabilidad política en la República Democrática del Congo, lo que demuestra la importancia crítica de un sistema judicial imparcial y justo.