Título: La crisis humanitaria persiste en Gaza a pesar del llamamiento urgente de ayuda
Desde el inicio de la ofensiva militar israelí en Gaza han pasado más de 110 días y las comunidades locales se enfrentan a una situación de hambre extrema. Según las últimas cifras, más de una cuarta parte de los hogares del enclave padecen hambre.
Alrededor de 1,9 millones de residentes, hombres, mujeres y niños, o casi el 85% de la población, se vieron obligados a huir de sus hogares. La situación es alarmante y requiere una intervención urgente.
Sin embargo, a pesar de los llamados de ayuda y los esfuerzos de las organizaciones humanitarias, la entrega de ayuda humanitaria sigue bloqueada debido a complicaciones políticas. El presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sissi, denunció la actitud de Israel de obstaculizar deliberadamente la distribución de ayuda para presionar a la Franja de Gaza y a sus habitantes.
Egipto, vecino oriental de Gaza, garantiza que el cruce de Rafah permanezca abierto las 24 horas del día, los 7 días de la semana, los 30 días del mes. Sin embargo, los procedimientos establecidos por Israel para permitir la entrega de ayuda crean obstáculos adicionales, retrasando así una ayuda vital para la población.
Según la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), de las 21 entregas previstas entre el 1 y el 10 de enero, sólo tres fueron autorizadas por Israel. Esta situación pone en peligro la vida de los residentes que necesitan con urgencia alimentos, medicinas y otros suministros esenciales.
A medida que la ofensiva militar se extiende ahora al sur de Gaza, la crisis humanitaria sigue empeorando. La población local es rehén de conflictos incesantes y dificultades para acceder a la ayuda humanitaria.
Es hora de que la comunidad internacional intensifique sus esfuerzos para presionar a Israel para que garantice la entrega rápida y sin obstáculos de ayuda a Gaza. La vida y el bienestar de miles de personas dependen de ello. No se puede seguir ignorando la situación en Gaza; se necesitan medidas urgentes para poner fin a esta crisis humanitaria.