El reciente discurso del portavoz militar israelí, el contralmirante Daniel Hagari, sobre la incapacidad de eliminar a Hamás plantea cuestiones cruciales sobre la viabilidad de los objetivos bélicos del gobierno israelí. Esta declaración contrasta marcadamente con la posición del Primer Ministro Benjamín Netanyahu, que pone de relieve las tensiones internas dentro del gobierno y el ejército israelíes.
En una entrevista con el Canal 13 de Israel, el contraalmirante Hagari dijo que la idea de destruir a Hamás y hacerlo desaparecer es ilusoria. La declaración provocó inmediatamente una respuesta mordaz de la oficina de Netanyahu, enfatizando que la seguridad de Israel tiene como objetivo eliminar las capacidades militares y gubernamentales de Hamás en Gaza.
Sin embargo, a pesar de los posteriores esfuerzos de aclaración por parte del ejército israelí, las diferencias parecen estar creciendo entre el gobierno israelí y su ejército. La presión sobre Netanyahu está aumentando para que desarrolle una estrategia para la gobernanza posconflicto en Gaza, particularmente después de que los ataques de Hamas provocaran la pérdida de vidas y la toma de rehenes.
Ocho meses después de la guerra, crecen las dudas sobre si la campaña militar de Israel logrará sus objetivos y neutralizará la ideología de Hamás, a pesar de las afirmaciones de Netanyahu sobre el número de combatientes de Hamás muertos. Estos elementos resaltan los complejos desafíos que enfrenta Israel en su gestión del conflicto.
Los comentarios del contraalmirante Hagari también resaltaron la realidad de que la desaparición total de Hamás podría resultar una tarea insuperable. De hecho, Hamás está profundamente arraigado en la sociedad de Gaza y eliminar al grupo no será una simple operación militar.
Es crucial que Israel cambie su enfoque y considere soluciones políticas y sociales para enfrentar los desafíos planteados por Hamás. La creación de instituciones eficaces y legítimas en Gaza, respetando al mismo tiempo los derechos de las poblaciones locales, podría proporcionar un medio más sostenible para garantizar la seguridad regional.
En conclusión, la admisión de la incapacidad de eliminar a Hamás abre el camino a una reflexión más realista e inclusiva sobre la resolución del conflicto en Gaza. En lugar de centrarse únicamente en la destrucción militar del grupo, Israel podría considerar enfoques innovadores destinados a promover la paz y la estabilidad en la región.
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Este editorial ofrece un análisis en profundidad de las cuestiones planteadas por las declaraciones del portavoz del ejército israelí y destaca la necesidad de repensar las estrategias para gestionar el conflicto con Hamás en Gaza.