Fatshimetrie, un nombre que resuena como una invitación a la evasión y al descubrimiento. Con este espíritu, el Ministro de Turismo visitó recientemente la Reserva de Caza y Vida Silvestre de Bombo-Lumene, situada al este de Kinshasa, capital de la República Democrática del Congo. Esta visita destacó la importancia de hacer del turismo un vector de diversificación económica para el país, rico en potencial turístico.
Didier M’Pambia Musanga, Ministro de Turismo, expresó su deseo de promover este sitio excepcional, propicio para el ecoturismo. De hecho, la Reserva Bombo-Lumene tiene muchas ventajas y es esencial considerar cómo estructurar proyectos que beneficien a la población local. El objetivo es claro: crear empleo y estimular el desarrollo económico preservando al mismo tiempo la riqueza ambiental de la región.
Para lograr estos ambiciosos objetivos, el ministro destacó la importancia del apoyo de socios nacionales e internacionales. Este enfoque es parte de la visión del presidente Félix Antoine Tshisekedi Tshilombo, que enfatiza la rehabilitación de los sitios turísticos existentes y la creación de nueva infraestructura para impulsar la industria turística.
La Reserva Bombo-Lumene tiene una rica historia que se remonta a su creación en 1968. Sin embargo, a lo largo de los años, la vida silvestre ha sido víctima de la caza furtiva, lo que ha provocado la desaparición de algunas especies icónicas. A pesar de estos desafíos, el sitio sigue siendo un lugar encantador donde la naturaleza reclama sus derechos, ofreciendo a los visitantes un encantador descanso del ajetreo y el bullicio urbano.
La actual gestión de la fundación Bombo-Lumene ha permitido revitalizar este patrimonio natural, atrayendo una vez más la fauna y la flora que enriquecen este lugar. Hoy en día, la Reserva Bombo-Lumene es un verdadero santuario de biodiversidad donde todos pueden recargar energías y reconectarse con la naturaleza.
En conclusión, la visita del Ministro de Turismo a la Reserva de Bombo-Lumene ilustra la voluntad del gobierno de hacer del turismo una palanca de desarrollo económico y social. Al promover estos tesoros naturales, la República Democrática del Congo abre nuevas perspectivas de futuro, combinando la preservación del medio ambiente, la creación de empleo y la promoción del turismo responsable. A través de iniciativas como esta, el país se posiciona como un destino imprescindible para los amantes de la naturaleza y exploradores en busca de autenticidad.