La actualidad deportiva vuelve a ser noticia con el incidente ocurrido durante el partido entre Marruecos y Congo durante la Copa de África de Naciones. El técnico marroquí Walid Regragui fue sancionado con cuatro partidos de sanción, dos de los cuales fueron suspendidos, tras las escenas de violencia que estallaron al final del partido.
La Confederación Africana de Fútbol (CAF) también sancionó a las federaciones de fútbol marroquí y congoleña, con multas de 20.000 dólares cada una. Además, se impuso una multa de 5.000 dólares a Regragui. Además, la federación marroquí tendrá que pagar una multa adicional de 10.000 dólares por el uso de bombas de humo por parte de sus aficionados durante el partido, quedando suspendida la mitad de esta multa.
La federación marroquí ha anunciado que apelará la decisión «injusta» de la CAF de suspender a Regragui, afirmando que el entrenador no ha cometido ningún acto contrario al espíritu deportivo. Regragui también vio desde la grada el siguiente partido, en el que Marruecos ganó por 1-0 a Zambia.
El altercado entre Regragui y el capitán congoleño, Chancel Mbemba, fue filmado y provocó fuertes reacciones. Mbemba insinuó a los periodistas tras el partido que Regragui le había insultado, pero el técnico marroquí negó haber realizado comentarios racistas. Las redes sociales inundaron de mensajes racistas dirigidos a Mbemba, mientras que Regragui afirmó haber recibido amenazas de muerte tras el incidente.
Imágenes de televisión mostraron a Regragui buscando a Mbemba después del partido, mientras el jugador estaba de rodillas dando gracias. Regragui agarró la mano de Mbemba y le dio una palmada en la espalda antes de continuar hablando. Puedes ver que está diciendo: «Mírame». El jugador retiró bruscamente la mano e hizo un gesto al videoárbitro, lo que provocó una pelea entre jugadores de ambos equipos.
Este incidente plantea una vez más interrogantes sobre el comportamiento de quienes practican el deporte y la importancia de preservar el espíritu del juego limpio. CAF quiere recordarles que cualquier forma de violencia, racismo o insulto es inaceptable dentro y fuera de los campos de fútbol.