Fatshimetrie, 18 julio 2024 (FMT).- La explotación eficiente de las heces para la producción de fertilizantes químicos es una perspectiva interesante y prometedora que podría revolucionar la agricultura en la República Democrática del Congo. Esta idea innovadora, presentada por el profesor Pierre-Albert Ngueliele, ambientalista, abre nuevas puertas para la valorización de residuos, contribuyendo al mismo tiempo a la preservación del medio ambiente y a la autonomía energética del país.
Cuando se considera la cantidad de materia fecal producida diariamente por la población de Kinshasa, se hace evidente la necesidad de un tratamiento adecuado y su potencial desaprovechado. Con 400 gramos de materia fecal por persona y día en una ciudad de 17 millones de habitantes, el volumen generado es colosal y podría ser una fuente importante de fertilizantes, gas y electricidad, recursos que actualmente la RDC importa a un gran coste.
El profesor Ngueliele destaca que la creación de una industria procesadora de materia fecal presenta importantes ventajas para el país. Esto no sólo reduciría los costos de importar fertilizantes químicos, sino que también brindaría la oportunidad de producir electricidad y gas localmente, contribuyendo así a la autosuficiencia energética y reduciendo las emisiones nocivas para el medio ambiente.
Al tratar adecuadamente la materia fecal, ésta podría transformarse en fertilizantes orgánicos de alta calidad, promoviendo así la fertilidad del suelo y la productividad agrícola. Además, la producción de gas a partir de este proceso podría servir como combustible para cocinar alimentos, reduciendo así la presión sobre los recursos forestales y limitando las emisiones de CO2 vinculadas a la deforestación.
En conclusión, la valorización de la materia fecal para la producción de fertilizantes químicos es de considerable interés para el desarrollo sostenible en la República Democrática del Congo. Al explotar inteligentemente estos desechos orgánicos, el país no sólo podría mejorar su agricultura y seguridad alimentaria, sino también reducir su dependencia de costosas importaciones y contribuir a la preservación del medio ambiente. Es hora de considerar seriamente el establecimiento de una industria procesadora de materia fecal en la República Democrática del Congo, para un futuro más sostenible y próspero.