Fatshimetry: Llamado solemne a la responsabilidad de los jefes militares
En el centro de la problemática sociopolítica de Nigeria, las últimas noticias han visto la aparición de un nuevo episodio de tensiones entre las autoridades militares y la oposición política. De hecho, el candidato presidencial del Partido Democrático Popular (PPD) para 2023, Atiku, ha emitido una advertencia inequívoca a los jefes del ejército y a los comandantes militares del país. En una poderosa declaración publicada en las redes sociales, advirtió contra cualquier uso de fuerza letal contra manifestantes pacíficos, amenazándolos con enfrentar la justicia por sus acciones, incluso después de que se jubilaran.
En el centro de esta advertencia está la necesidad de respetar el derecho constitucional fundamental a la protesta pacífica. Atiku enfatiza firmemente que este derecho está anclado en la ley suprema del país y debe ser protegido por las autoridades gubernamentales y las fuerzas de seguridad. Es imperativo garantizar un entorno seguro y protegido para quienes ejercen su derecho a la protesta pacífica, a fin de preservar la democracia y el Estado de derecho.
Ante esta afirmación, la presidencia reaccionó criticando a Atiku por no haber condenado los saqueos y la destrucción que acompañaron las manifestaciones. El portavoz presidencial pidió a Atiku que siga el ejemplo de las figuras de la oposición en el Reino Unido que condenaron los disturbios en curso en el país y apoyaron las medidas tomadas por el gobierno.
Si bien reconoce el derecho a protestar según lo establecido en la Constitución de 1999, la presidencia también enfatiza la necesidad de garantizar la paz pública, la seguridad, el orden y el respeto de la ley. Elogió la profesionalidad y la moderación de las fuerzas de seguridad en su gestión de las manifestaciones.
En conclusión, este enfrentamiento entre Atiku y la presidencia pone de relieve las tensiones persistentes entre la oposición política y el gobierno, así como las cuestiones cruciales que rodean el respeto de los derechos democráticos y las libertades fundamentales en Nigeria. Esta situación exige una profunda reflexión sobre la responsabilidad de los líderes militares y políticos, así como la necesidad de promover el diálogo constructivo y la resolución pacífica de los conflictos para garantizar la estabilidad y el progreso del país.