**Una nueva política diplomática para Siria: Francia y Alemania por delante**
El 3 de enero de 2025 se produjo un importante punto de inflexión en las relaciones entre Occidente y Siria con la visita de Jean-Noël Barrot y Annalena Baerbock a Damasco. Este viaje marca el inicio de un diálogo renovado, impulsado por la caída del régimen de Assad, y destaca un deseo colectivo de iniciar una transición democrática en Siria. Mientras millones de sirios sufren las consecuencias de una guerra devastadora, esta medida occidental también podría servir para estabilizar la región frente a desafíos como la radicalización y el tráfico de drogas. La visita a la infame prisión de Saydnaya pone de relieve la dualidad de esta diplomacia: reconocer los abusos del pasado y al mismo tiempo construir un futuro centrado en la justicia y la reconciliación. Francia y Alemania aspiran a redefinir un marco de cooperación que respete los derechos humanos y pretenden hacer oír la voz del pueblo sirio en esta dinámica. El camino hacia una Siria funcional e inclusiva está plagado de obstáculos, pero esta iniciativa conjunta bien podría representar un paso decisivo hacia la paz.