La COP28 está actualmente en marcha en Dubai y está atrayendo cada vez más atención. Las discusiones se centran en medidas para limitar el calentamiento global y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Entre los temas tratados, el de la energía nuclear ocupó un lugar importante.
De hecho, una veintena de países, entre ellos Estados Unidos, Francia, Emiratos Árabes Unidos, Japón, Ghana y Marruecos, han expresado su deseo de triplicar las capacidades nucleares mundiales de aquí a 2050. Según ellos, la energía nuclear puede desempeñar un papel crucial en la lucha contra el calentamiento global reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles, como el carbón y el gas.
Esta posición fue apoyada por John Kerry, enviado especial del presidente estadounidense para el clima, quien dijo: «Sabemos que no podemos alcanzar la neutralidad de carbono para 2050 sin energía nuclear». Los países firmantes también se basan en las recomendaciones del IPCC, que recomendó en uno de sus informes aumentar la producción de energía nuclear como parte de un escenario de transición energética.
Sin embargo, es importante destacar que China y Rusia, dos actores importantes en el campo de la energía nuclear, no se encuentran entre los firmantes. Esta ausencia plantea dudas sobre la adhesión de estos países a esta estrategia.
Además, cabe mencionar que algunos países firmantes ya han invertido en energía nuclear, como Japón y Ucrania, a pesar de los riesgos asociados a esta tecnología. Marruecos, por su parte, está estudiando las posibilidades de desarrollar la energía nuclear para diversificar sus fuentes energéticas y reducir su dependencia del exterior.
En conclusión, la cuestión de la energía nuclear ocupa un lugar destacado en la COP28 de Dubai. Si algunos países lo ven como una solución para limitar el calentamiento global, quedan preguntas y desafíos que abordar, particularmente en términos de seguridad y gestión de desechos radiactivos. Ahora corresponde a los países participantes encontrar un consenso sobre esta cuestión crucial para el futuro de nuestro planeta.