La Escuela de Campo para Agricultores (CEP) se destaca una vez más al formar facilitadores comunitarios en el paisaje de Yangambi, en Tshopo. Este curso intensivo de formación de seis semanas de duración, apoyado por el Centro Internacional de Investigación Agroforestal y financiado por la Unión Europea en el marco del proyecto FORETS-FOOD, permitió a una treintena de participantes adquirir conocimientos profundos sobre técnicas de cultivo mejoradas.
Los facilitadores recibieron capacitación sobre diversos aspectos de la agricultura, incluidas prácticas de enmienda del suelo, control de enfermedades e insectos mediante biopesticidas y técnicas específicas para cultivos como tomates, pimientos, repollo, maíz y soja. Además de las prácticas agrícolas, la formación también abarcó la producción de compostaje para la fertilización del suelo y la reducción de residuos agrícolas.
Los resultados de esta formación ya son visibles, con una cosecha de 1.238 kg de tomates, 127 kg de pimientos y 417 kg de col producidos por los participantes. En los próximos días también se esperan cosechas de maíz, soja y frijol.
Esta iniciativa del CEP despertó el asombro del ministro provincial de Agricultura de Tshopo, Patrick Valencio Asumani. Según él, el CEP desempeña un papel crucial en el restablecimiento de la provincia de Tshopo como granero agrícola del país.
Estos facilitadores comunitarios desempeñarán ahora un papel clave al transmitir sus conocimientos a los miembros de sus respectivas comunidades. De esta manera se convertirán en embajadores de una agricultura mejorada, ayudando a aumentar la producción agrícola y estimulando la economía local.
Esta capacitación ilustra la importancia de la educación y el intercambio de conocimientos en el campo de la agricultura. Al capacitar a facilitadores comunitarios, el CEP ayuda a ampliar el impacto de sus programas y promover el desarrollo sostenible de las comunidades agrícolas.
Más allá de Tshopo, este éxito es una fuente de inspiración para otras iniciativas similares en todo el país. Demuestra que una agricultura mejorada puede ser una solución eficaz para combatir el hambre, la pobreza y los desafíos ambientales.
El CEP y sus socios continuarán trabajando juntos para promover prácticas agrícolas mejoradas y sostenibles, y para capacitar a más facilitadores comunitarios. A través de estos esfuerzos, podemos esperar ver un mayor éxito en la agricultura congoleña y una mayor seguridad alimentaria para todos.