Título: Cómo agregar agua a los granos de café antes de molerlos puede mejorar el sabor y el rendimiento de la extracción
Introducción :
Los amantes del café tienen desde hace mucho tiempo la idea de echar un poco de agua sobre los granos antes de molerlos. Un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Oregon parece confirmar las razones detrás de esta técnica y cómo afecta el sabor del café.
El problema de la electricidad estática:
Cuando se muelen los granos de café, se crea electricidad estática que hace que las partículas de café vuelen en todas direcciones. Esto se puede solucionar añadiendo agua a los frijoles antes de molerlos. El agua actúa como aislante, reduciendo el efecto de la electricidad estática. Esta técnica, conocida como técnica de la “gota de Ross”, está inspirada en la industria de producción de materiales.
Lucha contra la formación de grumos:
Agregar agua no solo reduce la estática, sino que también evita que se formen pequeños grumos durante la preparación. Estos grumos pueden provocar una extracción desigual del café, lo que significa que algunas partes del café no se aprovechan por completo y el sabor se resiente. Añadiendo agua se ayuda a prevenir la formación de estos grumos y se obtiene una extracción más homogénea.
Cantidad ideal de agua:
La cantidad de agua a añadir puede variar según el tipo de café y la finura del molido. No existe una regla universal, pero el estudio demostró que, en promedio, agregar agua aumenta el rendimiento de extracción en un 10%. Sin embargo, es importante mencionar que esto no necesariamente garantiza una diferencia notable en el sabor.
Diferencias entre los métodos de elaboración de cerveza:
Agregar agua antes de moler juega un papel más importante en las preparaciones de espresso y café filtrado. En el caso de una prensa francesa o AeroPress, donde la molienda es más gruesa, agregar agua no supone un cambio significativo porque toda el agua ya está en contacto con todo el café.
Conclusión :
Agregar agua a los granos de café antes de molerlos puede mejorar el sabor y el rendimiento de extracción del café. Esta técnica reduce la electricidad estática y evita la formación de grumos, garantizando una extracción más homogénea del café. Sin embargo, es importante encontrar la cantidad de agua ideal en función de cada tipo de café.