“La educación tradicional en el centro de los debates por la paz en África durante la 4ª edición de la Conferencia Africana”

La cuarta edición de la Conferencia Africana de Paz abrió sus puertas el 9 de enero en Nouakchott, Mauritania. Este evento, organizado por el Foro de Abu Dhabi para la Paz, tiene como objetivo promover un enfoque religioso en la resolución de conflictos en África, particularmente en el Sahel. El tema de la conferencia de este año se centra en la educación tradicional y su papel en la lucha contra el extremismo.

La conferencia reúne durante tres días a jefes de Estado, diplomáticos, investigadores y predicadores del mundo musulmán. Mauritania, país anfitrión, está especialmente representada por su presidente y Gambia es el invitado de honor de esta edición.

El tema elegido este año destaca la importancia de la enseñanza tradicional en África y su potencial para prevenir el extremismo religioso. Los organizadores desean especialmente apoyarse en las ancestrales escuelas coránicas, que han desempeñado un papel central en la promoción del Islam moderado e ilustrado. Según Mohamed Mahjoub, coordinador del comité organizador, es esencial restaurar estas escuelas a su estado anterior y utilizarlas como medio para promover una conciencia religiosa positiva en favor del Islam del siglo XXI.

Esta conferencia es de particular importancia para Mauritania, considerado uno de los países más estables de la región del Sahel. Según Cheikh ould Zein, ex miembro del Alto Consejo Islámico de Mauritania, Mauritania es un país de ciencia y moral, cuyos eruditos fueron actores importantes en la expansión del Islam en la región. El objetivo es mostrar que la religión puede ser un modelo de pacifismo, apertura y respeto hacia los demás.

La escuela de enseñanza tradicional mauritana, conocida como Mahadra, fue incluida recientemente en la lista del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, lo que atestigua su valor cultural y su importancia para África.

La conferencia se extenderá hasta el jueves 11 de octubre y el presidente de Gambia, Adama Barrow, fue honrado al recibir el Premio “Paz”. Esta edición es, por tanto, una oportunidad para resaltar las iniciativas africanas a favor de la paz y promover la educación tradicional como herramienta esencial para construir un futuro pacífico y armonioso para el continente.

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