La retirada gradual de la Misión de las Naciones Unidas en la República Democrática del Congo sigue atrayendo interés y siendo objeto de debate. Durante una conferencia de prensa conjunta en Kinshasa, Christophe Lutundula, ministro congoleño de Asuntos Exteriores, y Bintou Kéita, representante del secretario general de la ONU en la República Democrática del Congo, reafirmaron el compromiso adquirido para acelerar el proceso de retirada de la fuerza de la ONU.
Según Christophe Lutundula, el debate sobre la salida de la MONUSCO ya está cerrado: «No habrá discusión sobre la salida de la MONUSCO en términos de principios y compromiso entre la República Democrática del Congo y las Naciones Unidas». De hecho, el gobierno congoleño y la ONU ya firmaron un plan de retirada el 22 de noviembre de 2023, que establece los arreglos prácticos para una retirada gradual y ordenada de la MONUSCO.
El proceso de retirada ya ha comenzado, con una primera etapa prevista hasta abril de 2024 en la provincia de Kivu del Sur. A continuación se realizará una evaluación estratégica para determinar si la retirada debe continuar en la provincia de Kivu del Norte a partir de junio de 2024 y luego en la provincia de Ituri.
El presidente congoleño, Félix Tshisekedi, ya había expresado su deseo de que la MONUSCO se marchara durante la 78.ª Cumbre de las Naciones Unidas en septiembre de 2023. Subrayó que la República Democrática del Congo debe convertirse en el actor principal de su estabilidad y que podía contar con la MONUSCO para restablecer la paz y la estabilidad. era ilusorio y contraproducente.
Esta retirada gradual de la MONUSCO marca un paso importante en la estabilidad y el desarrollo de la República Democrática del Congo. Permitirá al país hacerse cargo de su propia seguridad y fortalecer su independencia. Sin embargo, es crucial que esta retirada se lleve a cabo de manera planificada y coordinada para mantener la estabilidad en las regiones afectadas.
La comunidad internacional seguirá siguiendo de cerca la evolución de este proceso de retirada y brindará apoyo a la República Democrática del Congo para garantizar una transición sin problemas. La retirada de la MONUSCO también abre nuevas oportunidades para que la República Democrática del Congo fortalezca sus capacidades internas de mantenimiento de la paz y desarrolle sus instituciones para garantizar la seguridad y el bienestar de su población.
En conclusión, la retirada gradual de la Misión de las Naciones Unidas en la República Democrática del Congo es un paso crucial en el proceso de estabilización y desarrollo del país. El gobierno congoleño está decidido a hacerse cargo de su propia seguridad, mientras que la comunidad internacional seguirá apoyando a la República Democrática del Congo en esta transición. La retirada de la MONUSCO también ofrece oportunidades para fortalecer las capacidades internas de mantenimiento de la paz y desarrollar las instituciones de la República Democrática del Congo.