El 18 de enero de 2024, el astronauta turco Alper Gezeravci logró una hazaña histórica al convertirse en el primer turco en unirse a la ISS (Estación Espacial Internacional). Esta misión de 14 días, realizada en colaboración con la empresa Axiom Space y la NASA, marca un momento de orgullo para Turquía y su presidente, Recep Tayyip Erdogan, que saludó este logro como un símbolo de “poder”.
Alper Gezeravci, un piloto de combate de 43 años con 21 de experiencia en la Fuerza Aérea turca, se unió a la ISS junto a otros tres astronautas europeos a bordo de un transbordador privado. Esta misión es de particular importancia para Turquía, que la ve como una afirmación de su condición de país cada vez más poderoso en la escena internacional.
El propio presidente Erdogan apoyó y destacó esta misión durante las elecciones presidenciales de mayo de 2023. Subrayó la importancia de este logro para el país y expresó su confianza en el papel del astronauta turco para galvanizar el orgullo nacional e inspirar a la juventud.
Sin embargo, algunos expertos subrayan que esta misión no significa necesariamente que Turquía vaya a desempeñar un papel de liderazgo en el escenario político mundial. Las fluctuaciones en su política exterior y su participación en conflictos como el entre Rusia y Ucrania han dificultado que Ankara tenga un impacto significativo en la agenda política global.
Sin embargo, Turquía está llevando a cabo un programa espacial serio con sus satélites y su agencia espacial creada en 2018. Los objetivos de la estrategia espacial turca incluyen, en particular, el envío de un astronauta turco a la ISS, que representa el primero de los diez objetivos de esta estrategia.
Para Turquía, este evento histórico es una validación de sus objetivos tecnológicos y una forma de fortalecer el orgullo nacional. El director del Centro Espacial y de Aviación de Gühem, Halit Mirahmetoglu, también espera que esta misión contribuya a iniciar una nueva era de innovación científica y colaboración internacional.
El propio Alper Gezeravci es consciente del significado simbólico de su misión y ve en ella un medio para alcanzar los objetivos de sus estudios espaciales. Lleva consigo los sueños del pueblo turco a las profundidades del espacio.
En conclusión, la misión del astronauta turco Alper Gezeravci a la ISS representa un momento histórico para Turquía. Esto demuestra la ambición del país de convertirse en una importante nación espacial y realzar su orgullo nacional. Si bien esto no garantiza necesariamente un papel de liderazgo en el escenario político global, el logro marca un paso importante en los esfuerzos de Turquía por posicionarse como una potencia espacial.