Los diamantes en bruto de De Beers experimentaron recientemente una caída de precio del 10% en su primera venta del año. La medida refleja la sobreproducción y la baja demanda que han hecho bajar los precios de los diamantes tallados en los últimos meses. En un mercado en dificultades, De Beers busca adaptarse para impulsar las ventas y revivir la moda de los diamantes.
La industria del diamante ha tenido altibajos en los últimos tiempos. Después de un período de fuerte demanda principalmente en los Estados Unidos, los precios habían aumentado marcadamente. Sin embargo, la inflación y el fin de las ayudas financieras ligadas a la crisis sanitaria han provocado una caída del apetito por los diamantes. Algunos tipos de diamantes han experimentado una caída de precio de hasta un 20-25%, especialmente los de calidad media o baja. Esta situación ha afectado al negocio de tallado en India, el mayor actor de la industria.
Ante esta situación, De Beers ya había hecho algunas concesiones a sus clientes al no comprar todas las piedras preciosas inicialmente previstas. La caída de precios durante la última venta refleja el deseo de De Beers de adaptarse a la demanda actual y reactivar el mercado. Según algunos observadores, el mercado ha llegado a su punto más bajo y los precios están empezando a recuperarse.
A pesar de estas dificultades, De Beers no parece darse por vencido. El grupo ha invertido recientemente mil millones de dólares en colaboración con el gobierno de Botswana para ampliar la explotación de la mina de Debswana. Este yacimiento, conocido por la excepcional calidad de sus piedras, se transformará en una mina subterránea durante los próximos 20 años. Esta inversión demuestra el optimismo de De Beers sobre el futuro del mercado de diamantes.
En conclusión, el mercado de los diamantes se enfrenta a importantes desafíos, con precios en caída y una demanda lenta. De Beers está tratando de adaptarse bajando los precios de sus diamantes en bruto e invirtiendo en ampliar sus operaciones mineras. El futuro sigue siendo incierto para la industria de los diamantes, pero están comenzando a surgir signos de recuperación, lo que proporciona un rayo de esperanza para los actores de este sector.