Título: Mujeres tatuadas en Marruecos: una celebración de la autoexpresión a pesar de los persistentes tabúes
Introducción :
Marruecos, un país rico en tradiciones ancestrales, alberga una práctica centenaria: el tatuaje. Si bien esta forma de expresión artística alguna vez fue común entre los bereberes, hoy en día todavía se considera un tabú en la sociedad marroquí, particularmente cuando se trata de mujeres. Sin embargo, una reciente exposición titulada «Mujeres sabias», organizada por el Instituto Francés de Casablanca, pone de relieve esta tradición presentando perfiles de mujeres tatuadas, creados por Aïda, tatuadora marroquí residente en Francia. Esta exposición no sólo sirve para celebrar este arte ancestral, sino también para desafiar las normas sociales y fomentar el orgullo por la autoexpresión.
Tradiciones antiguas:
Durante siglos, los tatuajes fueron una parte integral de la cultura bereber en Marruecos, tanto para hombres como para mujeres. Algunos representaban la guerra o la caballería, otros eran expresiones de la naturaleza y también había diseños que mostraban a mujeres listas para casarse. Sin embargo, a partir de la década de 1970, las actitudes hacia el tatuaje comenzaron a cambiar en Marruecos. Hoy en día, a pesar del resurgimiento del arte, muchas personas todavía lo desaprueban, especialmente cuando los tatuajes los usan mujeres.
Lenta modernización:
El propio Nabil Ammoura, tatuador afincado en Rabat, constata una evolución gradual en la sociedad marroquí en lo que respecta al tatuaje. Mientras que hace 10 años el tatuaje estaba reservado casi exclusivamente a los hombres en Marruecos, hoy en día, cada vez más mujeres dan el paso y se tatúan. Esto se explica en parte por la apertura de estudios de tatuaje de calidad, donde los padres pueden acompañar a sus hijas y asegurarse de que todo transcurra en buenas condiciones. A pesar de ello, persisten ciertos prejuicios y las mujeres todavía son amonestadas por sus tatuajes.
Un acto de emancipación:
Para las mujeres con tatuajes, estas marcas en la piel suelen representar mucho más que un simple adorno. Son una afirmación de su libertad y un medio para emanciparse de las limitaciones sociales. Los tatuajes se convierten en herramientas para expresar su fuerza, perseverancia y rebelión. Zineb Achraka, una marroquí que ha vivido en Francia e Italia, habla de cómo sus tatuajes fueron para ella una oportunidad de mostrar su resiliencia ante los desafíos de la vida. A pesar de las críticas y prohibiciones, afirma que cada uno es libre de hacer con su cuerpo lo que quiera.
Conclusión :
La exposición “Mujeres Sabias” en el Instituto Francés de Casablanca ofrece una plataforma única para romper tabúes y promover el tatuaje como forma de autoexpresión. Destaca la antigua tradición marroquí al tiempo que destaca los desafíos que enfrentan las mujeres tatuadas en una sociedad aún reacia a esta forma de arte. El camino hacia la plena aceptación del tatuaje en Marruecos es aún largo, pero esta exposición ayuda a abrir mentes y fomentar una mayor tolerancia hacia esta forma de expresión personal.