Acusaciones de acoso militar por parte de las FARDC en las vías de servicio agrícola del sector de Ruwenzori, territorio de Beni, Kivu del Norte.
La Nueva Sociedad Civil Congoleña (NSCC) del sector de Ruwenzori, territorio de Beni, ha emitido recientemente declaraciones acusando a las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo (FARDC) de acosar las vías de servicio agrícola de esta región. Según Meleki Mulala, coordinador del NSCC, los soldados enviados a la zona han levantado barreras ilegales donde exigen impuestos ilegales de entre 500 y 1.000 francos congoleños a los agricultores locales.
Esta situación ha despertado la indignación entre la población del sector Ruwenzori, que depende en gran medida de la agricultura para su sustento. Los residentes locales ya están sufriendo las consecuencias de los conflictos armados, y estos acosos militares no hacen más que agravar sus dificultades. Es inaceptable pedir dinero a agricultores que ya están luchando para alimentar a sus familias en una época de frágil seguridad.
Ante estas acusaciones, el NSCC tomó medidas contactando al comandante militar del sector. Se compromete a tomar medidas para poner fin a estas prácticas de acoso. Sin embargo, es necesario permanecer atentos a la aplicación de estos compromisos y garantizar que la población realmente no sufra estos abusos.
Es crucial enfatizar que estos acosos militares obstaculizan el desarrollo agrícola de la región, complican la vida de los agricultores e interrumpen su acceso a los recursos necesarios para sus actividades. Esto tiene un impacto directo en la economía local y limita las perspectivas de desarrollo de la comunidad.
Es fundamental que las autoridades competentes tomen medidas concretas para poner fin a estas prácticas de acoso militar y garantizar la seguridad y la tranquilidad de los agricultores del sector de Ruwenzori. Es fundamental promover un entorno propicio para la actividad agrícola, con el fin de apoyar el desarrollo económico y social de esta región.
No se debe tolerar el acoso militar, especialmente cuando apunta a poblaciones que ya son vulnerables. Las autoridades deben actuar rápidamente para poner fin a estas prácticas ilegales e injustas y así permitir que los agricultores prosperen y contribuyan al desarrollo de sus comunidades. El sector Ruwenzori merece especial atención para superar los desafíos que enfrenta y crear un futuro mejor para sus residentes.