Las noticias de los agricultores siguen siendo el centro de las preocupaciones, a pesar de las medidas anunciadas por el Primer Ministro. De hecho, los sindicatos agrícolas continúan su movilización, considerando que las medidas son insuficientes para poner fin a su ira.
En Gard, las autopistas A9 y A54 siguen cortadas cerca de Nimes y los equipos siguen movilizados. Los agricultores planean reunirse para evaluar los anuncios del gobierno y reflexionar sobre acciones futuras.
Ciertamente, el Primer Ministro respondió a algunas de las demandas más urgentes de los manifestantes abandonando el aumento del impuesto sobre el diésel de uso fuera de carretera (NRG) y reforzando las compensaciones a los ganaderos afectados por la enfermedad del ganado MHE. También están previstas sanciones para los fabricantes de alimentos que no cumplan las leyes de precios.
Pero estas medidas no son suficientes para calmar la ira de los agricultores. Sindicatos, como el FNSEA, la Coordinación Rural y la Confederación Campesina, creen que hay que ir más allá. Piden medidas estructurales para apoyar de forma sostenible al sector agrícola.
La movilización de los agricultores estuvo marcada por bloqueos de carreteras en toda Francia, lo que refleja una mezcla de pasión y desesperación. Los manifestantes expresan su angustia por las dificultades que enfrentan, con lemas como “Niños lo soñamos, adultos morimos por ello”.
Más allá de la cuestión agrícola, estas manifestaciones también plantean cuestiones políticas. De hecho, el voto de los agricultores es un tema en las próximas elecciones europeas. Los políticos critican la respuesta del gobierno, considerando las medidas como soluciones temporales que no abordan los desafíos reales del sector.
Es importante subrayar que la situación sigue siendo tensa y que la movilización de los agricultores continúa. Por lo tanto, las próximas semanas serán cruciales para ver si el gobierno logrará encontrar medidas más sustanciales para satisfacer las expectativas del sector agrícola.