Título: Los mortíferos ataques de las FDA en Beni: la laxitud de las fuerzas de seguridad puesta en duda
Introducción :
El territorio de Beni, situado en la provincia de Kivu del Norte en la República Democrática del Congo, es escenario de ataques mortales atribuidos a las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF). En las últimas semanas, varios pueblos han sido objeto de estas incursiones, que han causado numerosas víctimas. Entre ellos se encuentran creyentes de la Iglesia Branham, asesinados durante un ataque durante el culto. Ante este aumento de la violencia, la población de Beni denuncia la laxitud de las fuerzas de seguridad y exige medidas más firmes para garantizar su seguridad.
Ataques extremadamente violentos:
Desde el domingo 28 de enero, las aldeas de Makodo, Matadi y Mangadola están en el punto de mira de las ADF. Al menos 15 personas perdieron la vida durante estos ataques, incluidos feligreses de la Iglesia Branham que se reunieron para el culto dominical. El pastor y su esposa fueron secuestrados, mientras que dos niños fueron asesinados. Esta violencia indiscriminada y gratuita sumió a las familias de las víctimas en el luto y el miedo.
El drama de las familias en duelo:
La repatriación de restos a Oicha, capital del territorio del Beni, comenzó este martes. Los familiares, a la espera de los cuerpos de sus seres queridos, acudieron a la morgue del Hospital General de Oicha para identificarlos. Los restos son empaquetados en bolsas y almacenados en espera de que las familias los recojan para el funeral. Este es un momento doloroso para estas familias que intentan encontrar a sus seres queridos y darles un último entierro digno.
La laxitud de las fuerzas de seguridad denunció:
La repetición de estos ataques en un mes ha provocado un grito de indignación de la sociedad civil en Beni. Según Isaac Kavalami, presidente de la sociedad civil de Oicha, estos ataques eran predecibles y podrían haberse evitado si se hubieran atendido las advertencias de la población. Denuncia la falta de operaciones serias por parte de las fuerzas de seguridad para contrarrestar los ataques de las ADF. La población se siente abandonada y exige medidas más firmes para proteger sus vidas.
El llamado a la resistencia y la solidaridad:
Ante esta alarmante situación, el alcalde del municipio de Oicha, Kikuku Nicolas, pide a la población que permanezca unida y confíe en el ejército congoleño. Recuerda que ya se están realizando ataques contra las ADF en otras regiones e insta a la población a apoyar a las fuerzas de seguridad en su misión. También insiste en la necesidad de multiplicar estrategias para erradicar definitivamente esta amenaza terrorista.
Conclusión :
Los ataques mortales perpetrados por las ADF en Beni han sumido a la población en la tristeza y el miedo. Los fieles de la iglesia Branham, reunidos para el culto, fueron víctimas de esta violencia indiscriminada. Ante estos repetidos ataques, la población exige medidas más firmes a las fuerzas de seguridad para garantizar su seguridad y poner fin a esta amenaza terrorista. Solidaridad y resistencia son las palabras claves para afrontar esta difícil situación.