Durante varias semanas, la situación en Gaza ha seguido deteriorándose. Los colonos israelíes han cerrado la frontera entre Egipto e Israel, impidiendo la entrega de ayuda humanitaria a Gaza. Además, se produjeron protestas frente a la principal puerta fronteriza del lado israelí, según medios de comunicación como Al-Arabiya.
Desde el inicio del envío de ayuda humanitaria el 21 de octubre, Israel ha puesto obstáculos constantemente a su distribución. En particular, exige que la ayuda pase primero por el punto fronterizo de Rafah hasta el punto fronterizo comercial de Ouga, entre Egipto e Israel, para ser examinada e inspeccionada, y luego regresar al lado palestino de Rafah, en un viaje de aproximadamente 100 kilómetros.
Al mismo tiempo, el Ministro del Ejército israelí, Benny Gantz, anunció su dimisión del gobierno de emergencia formado tras la operación “inundación de Al Aqsa” el 7 de octubre. Esta decisión estaría vinculada al anuncio de Netanyahu de un «régimen militar» en Gaza.
Según la Directora Ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, se estima que 17.000 niños en Gaza están huérfanos o separados de sus familias. La situación es cada día más deprimente y la organización implora al mundo que no abandone a estos niños.
Sobre el terreno, Israel continúa su agresión contra los civiles en la Franja de Gaza. Continúan los bombardeos y los enfrentamientos, en particular cerca del hospital de Al Amal y en la ciudad de Khan Yunis. Muchos civiles resultaron heridos o muertos durante estos ataques. Los ataques aéreos y el fuego de artillería israelíes también alcanzaron otras zonas, como la ciudad de Rafah.
Además, la Cruz Roja Palestina pidió ayuda internacional para encontrar a dos paramédicos desaparecidos. Los habían enviado a rescatar a una niña de seis años cuando se perdió todo contacto con ellos. La situación es preocupante y se debe instar a las autoridades israelíes a investigar esta desaparición.
El Ministerio de Salud de Gaza dijo que las autoridades israelíes llevaron a cabo 13 masacres en el espacio de 24 horas, que resultaron en la muerte de 112 personas.
Es urgente que la comunidad internacional intervenga y ejerza presión sobre Israel para que ponga fin a esta violencia y permita la entrega de ayuda humanitaria a Gaza. No se debe atacar a civiles inocentes y no se debe privar a los niños de sus familias y de su seguridad. La situación en Gaza requiere una acción rápida y concertada para evitar una escalada aún más grave del conflicto.