El presidente Cyril Ramaphosa pronunció recientemente su discurso anual sobre el estado de la nación, en el que destacó los logros de su administración, pero sin reconocer la falta de rendición de cuentas de su gobierno.
Durante un discurso de casi dos horas, el presidente destacó el tema de la democracia, con motivo del 30º aniversario de las primeras elecciones democráticas en Sudáfrica. Sin embargo, muchos observadores señalaron que su discurso se centró en gran medida en sus ambiciones electorales más que en los desafíos que enfrentan los sudafricanos a diario.
El presidente destacó los éxitos en la lucha contra la captura del Estado, incluida la recuperación de 8.600 millones de rands y la congelación de 14.000 millones de rands en activos por parte de la Unidad de Incautación de Activos del Estado (Autoridad Fiscal Nacional). También destacó el fortalecimiento del Servicio de Impuestos de Sudáfrica después de años de devastación causada por la captura del Estado.
A pesar de estas declaraciones, llama la atención que durante más de dos años, desde la finalización del primer volumen del informe de la comisión Zondo sobre la captura del Estado, no haya habido condenas. La comisión Zondo también implicó a miembros del gobierno de Cyril Ramaphosa en actos de captura del estado, algunos de los cuales estuvieron presentes durante el discurso sobre el estado de la nación. Sin embargo, no se tomó ninguna medida contra ellos.
Además, se ha recortado el presupuesto de la Autoridad Nacional de Fiscalía y Ejecución Penal (Hawks), lo que afecta las investigaciones relacionadas con la captura del estado. El gobierno ha enfrentado recortes presupuestarios para pagar su deuda, lo que ha tenido costosas consecuencias para los ciudadanos que dependen de los servicios públicos. Aunque el presidente Ramaphosa anunció que continuaría el paquete de asistencia social de R350, la agencia de seguridad social de Sudáfrica ha experimentado numerosos problemas en la distribución de las subvenciones, dejando a los beneficiarios esperando.
En cuanto a la crisis energética, el presidente dijo que los cortes de energía pronto terminarían gracias a la planificación gubernamental. También anunció una inversión de 240 mil millones de rands en el plan de transición energética hacia las energías renovables. Sin embargo, cabe señalar que el plan energético de Sudáfrica todavía depende en gran medida del carbón.
El presidente Ramaphosa también prometió mejorar la prestación de servicios públicos y crear empleos, áreas en las que su administración ha sido criticada. Desafortunadamente, para muchos sudafricanos que continúan sufriendo las consecuencias de la corrupción y la mala prestación de servicios públicos, el discurso del presidente suena vacío..
Es esencial que el gobierno continúe trabajando activamente para combatir la corrupción, garantizar la rendición de cuentas de sus miembros y mejorar la prestación de servicios públicos. El presidente Cyril Ramaphosa tendrá que poner las palabras en acción para recuperar la confianza del pueblo sudafricano.